˗ˏˋNCT ships oneshotsˎˊ˗

𝖫𝗎𝗐𝗈𝗈: 𝙖𝙣𝙜𝙚𝙡

Ship: Lucas x Jungwoo

Género: sad (?

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Lucas se dedicaba a preparar un desayuno simple mientras tarareaba una melodía, pero fue interrumpido cuando oyó unos pasitos acercarse hacia él.

Un adorable Sungchan de 5 años corría emocionado en dirección a su padre, traía puesta su tierna pijama azul con el dibujo de un ciervo en el centro de la playera, andaba descalzo, y su cabello estaba revuelto y apuntando a todas direcciones, ya que acababa de despertarse y aún no se lo cepillaban.

—¡Papi!—gritó emocionado el pequeño al llegar al lado de Lucas, levantaba sus brazos hacia arriba y abría y cerraba sus manitas para que su papá le hiciera caso, mientras mantenía un tierno puchero en sus labios.

Lucas no pudo resistirse a la ternura de su hijo, por lo que dejó a un lado lo que estaba usando para cocinar y levantó a Sungchan, dándole vueltas en el aire mientras el pequeño reía al decir que era un superhéroe ya que podía volar.

Lucas procuró ser cuidadoso y no dejar caer a su bebé, solo lo mantuvo en el aire por un par de segundos más y luego lo regresó al suelo.

—¿Te gustó campeón?—preguntó alegre mientras se arrodillaba para quedar a la altura de Sungchan.

—¡Si, mucho! ¡Otra vez, otra vez!—gritaba emocionado el infante mientras saltaba en su lugar y aplaudía repetidamente.

—Lo siento campeón, ahora no puedo, debo terminar de cocinar el desayuno, y sabes que luego vamos a salir, pero te prometo que seguiremos jugando cuando regresemos, ¿De acuerdo?—sonrió mientras le revolvía aún más su cabellera, y se daba la vuelta para terminar con su tarea.

—Está bien...—dijo algo triste Sungchan mientras movía su piecito de forma desanimada y mantenía su cabeza gacha, pero luego cayó en cuenta de que no sabía lo que su papá y él iban a hacer hoy—Oye, papi, ¿A dónde vamos a ir?—se atrevió a preguntar, mientras inclinaba a un lado la cabeza de forma tierna.

Lucas no respondió al instante, apagó la estufa que estaba usando una vez que terminó de cocinar, respiró hondo antes de darse la vuelta y encarar a su hijo, que lo veía con ojitos curiosos, esperando por una respuesta.

Caminó a la sala y le pidió que lo siguiera, lo que el pequeño hizo al instante, Lucas se sentó en el sillón y cargó a Sungchan para luego dejarlo sobre sus piernas.

—Bebé, ¿De verdad no recuerdas qué día es hoy?—preguntó triste el adulto, pero su hijo solo negó con la cabeza, sin una mínima idea de lo que ocurría hoy—Sungchan...hoy es el día de ir a dejar flores a tu papi Jungwoo y cuidar del lugar donde descansa, ¿Ya recuerdas?

Todo pareció cobrar sentido en la mente del niño, ahora entendía por qué su papi Lucas no fue a despertarlo para ir a la escuela, porque en este día él siempre le daba permiso de faltar a clases.

Puede que Sungchan aún fuera muy joven como para terminar de comprender el concepto de la muerte, pero era un niño listo, había notado como siempre en este día su papá se veía menos animado a comparación del resto del tiempo, no sonreía tanto y lo consentía más de lo normal.

—Papi...¿Cómo era él? ¿Cómo era mi papi Jungwoo?—preguntó curioso, queriendo conocer más de su otro papá, ya que no tiene muchos recuerdos de él.

Lucas sonrió al recordar a su amado, al pensar en sus delicadas facciones y su hermosa personalidad.

—Jungwoo era tierno, como un perrito, siempre tenía esa mirada curiosa en sus ojitos, de hecho tú heredaste eso de él, tienes los mismos ojos de tu padre, pero en vez de un cachorro pareces un venadito bebé—rió mientras acariciaba la cabecita de su hijo e intentaba peinarlo para distraerse de su dolor—Su sonrisa era la más brillante que te podrías imaginar, era tan cálida que parecía poder quitarte todos tus problemas, no hay nada que se compare con lo que sentía cuando podía verlo verdaderamente feliz—sonrió con nostalgia mientras intentaba aguantar el llanto—Él era muy amable con todos, trataba bien a las personas que no conocíamos en la calle, a personas aleatorias de los lugares a los que íbamos, hasta era bueno con la gente que no lo merecía, pero él siempre creía que todas las personas merecían un trato digno, su corazón era muy puro, pero el mundo no lo merecía, hasta el día de hoy sigo pensando que yo no merecía haber conocido a tan hermosa persona y que él se hubiera enamorado de mí, pero creo que fue un ángel que bajó del cielo para bendecirme contigo, eres todo para mí, no se qué haría sin tí.

Rió mientras una lágrima caía por su mejilla, pero Sungchan notó eso e inmediatamente levantó su pequeña manita para limpiar las lágrimas de su padre.

—Y si mi papi Jungwoo era tan buena persona, ¿Por qué se tuvo que ir?—preguntó triste.

—No lo sé bebé, al principio pensé que la vida era injusta y no dejaba vivir a las personas tan buenas como él, pero con el tiempo entendí que este horrible mundo no era merecedor de alguien tan puro como él.

Sungchan pareció entender y asintió varias veces mientras pensaba en todo esto.

—¿Lo extrañas?

—Demasiado, no hay día en el que no piense en él, pero eso también es lo que me motiva a protegerte, se que él nos está cuidando en algún lado, y no quisiera decepcionarlo, no pudo pasar mucho tiempo contigo pero se que él te ama con todo su corazón, nunca olvides eso, ¿Está bien?

—Ok, no recuerdo tanto sobre él pero se que lo amo mucho, también a tí—abrazó fuertemente a su papá mientras escondía su carita en su pecho, y Lucas no dudó en rodearlo completamente con sus brazos, repitiéndose en su cabeza que siempre cuidaría de su pedacito de cielo—Te amo, papá.

—Yo también te amo pequeño, Jungwoo y yo te queremos mucho—dejó un besito en la cabeza de su hijo.

Tal vez su esposo ya no estaba aquí para poder ver a su hijo crecer, pero Lucas se encargaría de honrar su memoria y nunca dejar solo a Sungchan.