Conversaciones Intimas

2.1K 74 17
                                    


"Antes que nada, relájate, no están solos,

mis sobrinos están con ellos,

así que no dejes que tu mente se vuelva loca "

"Y, en segundo lugar, ya que dijiste por favor dos veces"

La voz de Sanem sonaba seductora, "relájate"

Ella había girado su cuerpo para que se tumbara encima de él,

cubierto con la sábana, entre sus piernas,

empezando a dejar besos por toda la cara,

"Mmmm, me encan.....gustan tus besos, Sanem"

deslizándose hacia abajo, besando su pecho,

su estómago, para terminar con sus labios

por su, ahora, pene duro.


"Te daré alguna distracción"


Ella tiró la sábana sobre su cabeza,

Can ya estaba apoyando la cabeza contra la cabecera,

esperando con anticipación, para finalmente, FINALMENTE,

sentir esos deliciosos labios dulces alrededor de su verga.


Esta fue la mejor noche de su vida relacionada con el sexo,

él tenía que admitirlo, Sanem era otra cosa.

En la relación seria que tenía, él siempre era el que

estaba controlando las cuerdas, pero con ELLA

él era el que NO tenía el control.


Aun esperando sentirla, él sintió.... ¡nada!

"Sanem, ¿qué estás haciendo?"

"¿Ya estás distraído, Can?"

Cuando él dijo su "sí", supo que fue engañado.

Ella tiró la sábana sobre su cabeza mirándolo con triunfo.

"Sabía que lo haría"

Él le murmuró con una voz de advertencia

"Sanem, realmente serás mi muerte"


Sanem lo miró, sonriéndole con su sonrisa más adorable.

"¿Esperaba algo más, Sr. Can?"

Parpadeando de nuevo con sus pestañas no tan inocentes.

Gruñéndole a ella, "¡sabes muy bien

lo que estaba esperando, pequeña seductora!"

Tratando de agarrarla, ella apartó juguetonamente sus manos,

y con un seductor "recuéstese, Sr. Presumido"

él de nuevo se estaba rindiendo a ella, 

echándose hacia atrás con un suspiro.


"¡Cuando te voy a comer, quiero que me mires!"


Su respiración se detuvo por innumerables veces esa noche

viendo, sintiendo sus dulces y deliciosos labios 

besando su punta,

lamiendo su falo, 

Doble Dolor, Doble PlacerWhere stories live. Discover now