Capítulo 14

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Así que este nuevo 'cambio' con Jungkook no había sido lo peor.

Si tenía que ser completamente honesto; era bastante bueno, y estaba bastante sorprendido por lo agradable que era.

Si Taehyung pensaba que su comportamiento y autocontrol eran malos antes, su yo del pasado estaría horrorizado de sí mismo ahora y del 'lío' que había causado.

Todo empezó de forma bastante inocente y Taehyung no recordaba exactamente cómo se encontró a horcajadas en el regazo de Jungkook.

Estaban en medio de una intensa partida de Mario Kart de medianoche, y Taehyung seguía perdiendo, lo que comenzó a cansarlo después de la decimotercera vez. Así que después de pasar la decimocuarta marca, ya se había hartado y se giró hacia Jungkook, con una expresión poco divertida en su rostro y le pidió que hicieran otra cosa. El joven solo respondió con un chasquido de lengua y la promesa de que sería más gentil con él en esa ronda, pero Taehyung era plenamente consciente de que Jungkook y su gran ego nunca permitirían que eso ocurriera.

Ya había superado la derrota y estaba agotado de ese juego. Preferiría estar haciendo otra cosa, y solo había una cosa que Taehyung sabía con certeza que podía sacar a Jungkook de su estado competitivo. Así que mientras Jungkook tanteaba el mando del juego, intentando empezar una nueva partida, Taehyung desprendió las rodillas de su pecho e hizo un esfuerzo para arrastrarse por encima de la pila de bolsas de aperitivos en los cojines que lo separaban de Jungkook. El otro no pareció darse cuenta del ruido ni de los movimientos hasta que Taehyung se dejó caer sobre el regazo de Jungkook con un movimiento de extremidades, rodeando con sus brazos el cuello de Jungkook para evitar caer del otro lado del sofá.

Eso atrajo definitivamente la atención de Jungkook, y sus manos se lanzaron a agarrar las caderas de Taehyung por instinto, dejando caer el mando del juego entre sus regazos, y mirándolo con grandes ojos interrogantes.

Antes de que Jungkook pudiera preguntarle qué estaba haciendo, Taehyung fue directamente a por él y se inclinó, presionando sus labios firmemente contra los de Jungkook, cerrando los ojos con fuerza para no tener que mirar directamente a los grandes y adorables ojos de Jungkook que nunca dejaban de hacerlo sentir débil.

La pregunta murió en la punta de la lengua de Jungkook con una inhalación sobresaltada y Taehyung podía sentir cómo los labios del chico se movían al mismo tiempo que los suyos, aturdido pero ansioso.

Había una dulzura en los labios de Jungkook: una mezcla de menta y fruta del batido que tomó antes que hizo a Taehyung querer más y había una gran sensación de satisfacción al saber que podía hacerlo.

Taehyung suspiró en el beso e inclinó la cabeza, profundizándolo.

No importaba cuántas veces se hubieran besado, nunca superaría la sensación adictiva de los labios de Jungkook contra los suyos. Y se habían besado bastante.

Besos en la cama. Besos en el feo sofá. Besos en la oscuridad de la sala de karaoke, donde se concentraba menos en el canto y más en el sonido de los labios de Jungkook deslizándose contra los suyos. Besos en el suelo después de que Taehyung sufriera un colapso mental cuando su portátil se estropeó antes de poder guardar una copia de su partitura, y Jungkook tiró de Taehyung hacia su regazo, consolándolo con sus fuertes y seguros brazos y, finalmente, con sus labios.

Incluso con todos los besos, se abstenían de hacerlo en una habitación con alguien que no fuera ellos mismos.

No es que se esforzaran intencionadamente por ocultarlo a otras personas, simplemente era difícil excitarse cuando tus amigos estaban intentando ver cuántos centavos pueden equilibrar en sus caras, pero una vez que estaban solos, era más fácil distraerse. Podían estar haciendo los deberes o teniendo una conversación sobre música o juegos y de repente Jungkook se cernía sobre Taehyung, lamiendo su boca.

Fall asleep (fall for you) | KookVWhere stories live. Discover now