El final que merecemos.

Capítulo 12

pov.Ash

Abro los ojos lentamente mientras me estiro en la cama.
Me doy cuenta de que no hay luz aun en el cuarto,miro a la ventana y veo que aun es de noche.

Cojo mi móvil para mirar qué hora es y al incorporarme en la cama me doy cuenta de que Eiji no está a mi lado,tampoco hay luz en el baño así que supongo que habrá bajado a la cocina.

Enciendo el móvil.
Aún son las cuatro de la mañana.

Dejo el móvil de nuevo en la mesita y me tumbo en la cama tapandome hasta arriba.

No puedo evitar sonreír cuando me viene a la cabeza lo que ha pasado con Eiji hace unas horas,de verdad que ha sido genial.Solo nos hemos estado besando y hemos intercambiado un par de caricias,pero lo he sentido tan íntimo entre nosotros que no puedo evitar estar feliz.
Reconozco que sentir el tacto de Eiji contra mi piel me costó un poco al principio,pero Eiji se portó muy bien conmigo y me trató con mucho cuidado,fue despacio y amoldandose a mi,algo que nunca me había pasado.
Tengo claro que Eiji no me va a hacer daño nunca y con esta noche me lo ha confirmado mucho más,pero mi mente a veces me juega malas pasadas.

Ya que estoy despierto decido quedarme esperando a que suba Eiji,así podré volverme a dormir cogiendo su mano.

Dios mio quien me ha visto y quien me ve.

Pasan un par de minutos y me extraña que no esté aún de vuelta ya,así que decido levantarme e ir a buscarle.
Me estiro al levantarme de la cama y me dirijo a la puerta,cuando pongo la mano en el pomo de esta escucho un duro golpe que parece provenir de la planta de abajo.

¿Se le habrá caído algo a Eiji?

Salgo rápido de la habitación por si le hubiera pasado algo y comienzo a bajar los escalones lo más rápido que puedo.

Conforme voy bajando escalones voy diferenciando unas cabezas en el salón.
¿Qué coño está pasando?

Me quedo un momento escondido en las escaleras para examinar la situación.
Hay unos hombres trajeados en nuestro salón,cuento a unas siete personas.Están hablando entre ellos,estaban separados como en dos grupos,uno de tres hombres gigantes y otros cuatro que estaban en medio del salón de una constitución algo más estándar.
Bajo dos escalones más para ver qué estaban haciendo.

Uno de los hombres que parece ser el cabecilla del grupo se mueve hacia un lado de la habitación mientras habla y una vez se aparta puedo ver que es lo que está pasando.

Mi estómago se contrae y unas ganas de vomitar increíbles se apoderan de mi.
Salgo de mi escondite y bajo el resto de escaleras bastante agitado.

-¡Eiji!

Eiji me escucha y levanta la cabeza.
Lágrimas recorren su rostro y veo como con su mirada me suplica ayuda.

-Ash...
-¡Tu a callar!-el hombre que se separó anteriormente del grupo le interrumpe y vuelve a acercarse a él,el hombre le propaga una patada en el estómago a Eiji.

Este se contrae del dolor y yo me acerco a ellos lleno de furia y dispuesto a matar.

-¡Hijo de puta!-las venas de mi cuello se hinchan y me lanzo hacia ellos sin ningún miramiento y de repente dos pares de manos me sujetan alejándome de ellos.

Con la furia recorriendo mi cuerpo había olvidado que había más gente en la habitación.

No se que esta pasando.

Unos tíos tienen sujeto a Eiji por los brazos en el centro del salón donde estaba el grupo de cuatro que había nombrado antes.
Los que me tienen sujeto son los otros tres que imagino que estaban esperando mi llegada.