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Pequeña aclaración antes de empezar: En esta historia Yuqui tiene la misma edad que Sunghoon y Jake, pero por pocos meses es menor.

Quise elegirla a ella porque la verdad es que se me hace muy tierna y hermosa 😖💕

Ba ES MUY TIERNA Y HERMOSA

Bueno ya dejó de molestar y me voy ¡Disfruten la lectura!

[❄️💋]

"Los corazones de los patinadores son tan frágiles como el cristal, si son tan frágiles, entonces ... Intentemos destrozar todo en pedazos"

❄️ Narra Sunghoon ❄️

Había días como los de hoy, en los que yo simplemente me imaginaba cómo sería tener la vida de un adolescente normal, común y corriente.

Sería divertido: hablar con amigos, salir, divertirse, salir a citas con la chica que tanto le gusta, pedirle que sea su novia y ser completamente feliz después.

Sin embargo, esa no era la vida que a mí me tocó vivir.
Quisiera volver a hacia atrás, retroceder en el tiempo y jamás descubrir mi talento patinando o jamás haberle dicho a mamá que encontré ese talento.

La música nuevamente suena en aquella enorme pista de hielo casi completamente vacía, donde solamente se encuentra su madre y su entrenador atentos a cada movimiento suyo, esperando que fueran perfectos. Porque está no era una rutina cualquiera, era la rutina que debía presentar en un importante concurso dentro de dos meses.

Pero estaba siendo muy complicado, no se encontraba del todo concentrado. En su cabeza no solamente estaban los pasos de aquella difícil coreografía, si no que también estaban las preocupaciones de que ni bien terminará su entrenamiento, debería ir corriendo a la escuela para realizar un examen de matemáticas bastante complicado. Sin contar de qué también estaba practicando desde hace unas cuatro horas sin parar y su cuerpo ya le pedía un descanso.

Pero no planeaba parar por ahora, no hasta que todo saliera perfecto, no hasta dejara de caerse al suelo en aquel salto que estaba a la mitad de su rutina. No importaba si hacía de manera perfecta y limpia el inicio, su madre siempre lo miraba con clara decepción cada vez que su cuerpo caía al suelo...

Se estaba esforzando demasiado pero su madre le importaban más los resultados malos que estaba obteniendo, que el esfuerzo de su propio hijo.

— ¡Sunghoon!¡Más te vale que te concentres, hazlo otra vez! — le gritó su madre desde las gradas con una expresión molesta en el rostro. —

Suspiró cansado y asintió cabizbajo, patinando nuevamente hasta el centro de la pista.

Perdió la cuenta de las veces en las que escucho aquella frase desde que llegó aquí a las 5:30 am, aún cuando el alba se andaba paseando por el borde del cielo dándole leves colores de amarillo y rosa, a los rastros que quedaban de la oscuridad de la noche.

Sus piernas estaban a nada de ya no responderle, estaba demasiado cansado. De hecho incluso para lo único que se había detenido fue para tomar unos pocos sorbos de agua.

Pero en este preciso momento no le importaba, no quería detenerse, no importaba que posiblemente sus piernas y rodillas estén con algún moretón como producto de las 180 veces que tal vez se calló.
Todo esto iba a ser por una buena causa.

Lo único que su corazón esperaba, era que al final de esta práctica obtuviera aunque sea una sonrisa de su progenitora.

— Tu puedes, está vez saldrá bien— susurro para si mismo —

♡꒰𝓽𝓱𝒆 𝓴𝓲𝓼𝓼𝓲𝓷𝓰 𝓽𝒆𝓪𝓬𝓱𝒆𝓻꒱ˢᵘᶰᵍˢᵘᶰWhere stories live. Discover now