¿me extrañaste..? ☘︎ RenHyuck

일곱

Desperté con un gran peso encima, me asusté pensando que el techo me había caído encima. Pero no, no era el techo, era solo Renjun que estaba sobre mí, me sobresalté y casi lo desperté, pero me mantuve en silencio porque sería incómodo despertarlo en esta posición.

Estaba bastante incómodo con Renjun sobre mí, pero no lo despertaría,  él tendría que despertar luego,  a no ser qué  ¿Está muerto?

-¿Renjun?

Silencio.

-¿Renjun!?

Más silencio.

-¿¡Renjun!?

Aún más silencio.

Me moví exageradamente para salir de abajo de Renjun, y lo único que gané fue un golpe.

-¿Me acabas de despertar? ¿Acabas de hacer eso? Firmaste tu sentencia de muerte maldito

-No fue apropósito,  estabas recostado sobre mí

Renjun se quedó en silencio.

-¿Cómo llegaste ahí?

-No lo sé, pero vayamos a desayunar, hoy acabaron mis vacaciones,  debo volver al trabajo y la universidad.

Trabajo..universidad,  nunca comencé la universidad y tampoco tuve un trabajo alguna vez, mi situación económica era muy distinta a la de Renjun, nunca necesité trabajar para pagar la universidad,  y él en cambio comenzó a trabajar poco antes de que yo me fuera.

-Me gustaría ir a la universidad también.

-Entonces anda, no puedo negartelo.

-También necesito un trabajo.

-Bien, debes buscar uno ¿O no sabes cómo?

-Bueno, de hecho, no lo sé...

-Bien, cerca de la cafetería dónde trabajo hay una tienda de ropa que busca un vendedor, puede que aún lo sigan buscando, luego de inscribirte en la universidad puedes ir. Si es necesario puedo llevarte.

-¿En el auto caro que tienes afuera?

-Sí, ahora no digas ni media palabra más o me arrepentiré de ser generoso.

El viaje en el auto de Renjun fue largo y bastante incómodo, yo iba en el asiento trasero y Renjun manejaba, en las luces rojas me miraba de reojo y yo esquivaba su mirada, supongo que quería verificar que estuviera vivo.

La universidad a la que asiste Renjun es realmente linda, supongo que debe ser igual de cara.

-¿Qué? ¿Es eso lo que cuesta solamente la matrícula? ¿Y además debo hacer un examen!?

-Claro señor Lee, por políticas del establecimiento debe pagar la matrícula antes y luego el primer mes de clases.

-Están completamente locos si piensan que gastaré dinero que no tengo para hacer un maldito examen. Me voy de aquí.

Renjun me acompañó a la salida y me indicó dónde estaba aquella tienda, al menos si no iba a estudiar debía trabajar un poco.

-Buenas tardes ¿Buscan un vendedor?

-¿Quién? ¿Donghyuck?

-¿Mamá?

Quedé estupefacto al ver quién estaba tras el mesón,  era mi madre, la persona que ignoro mi existencia desde que me fui, ¿Ahora trabajaba en una tienda de ropa?

-¿Que haces aquí,  Donghyuck?

-¿No es evidente acaso que busco un trabajo?

-Tú deberías estar en Canadá, no hablándome de esa manera. Soy tu madre, Hyuck.

-¿Mi madre? Fuiste mi madre hasta hace dos años atrás, cuándo me fui a Canadá no dijiste nada, sólo cambiaste de número y dejaste de enviar dinero ¿Acaso sabes cómo volví? Tuve que venir en un avión con el peor de mis enemigos y rogarle un espacio en su casa a mi ex mejor amigo ¿Tienes idea lo difícil y vergonzoso que fue?

-Hijo, nada de lo que dices pasó así,  déjame explicártelo...

-No, no necesito explicaciones ¡Fingiste que había muerto! ¡Taeyong me lo dijo todo!

-Tuve una razón hijo...sólo intenta escuchar

-No necesito trabajo en esta tienda, buscaré trabajo al otro lado de Seúl si es necesario para no verte la cara. Sigue cómo estabas, finge que morí,  me da lo mismo, prefiero pensar que estoy muerto para tí a que no me buscaste jamás.

Salí de aquella pequeña tienda para comenzar a correr, no quería que ella me siguiera. Entré en la universidad de Renjun  y me escondí en la biblioteca,  no había nadie allí,  así que no llamaría la atención de nadie.

Renjun salía a las cinco de la tarde de sus clases, y apenas eran las dos treinta, tenía mucho por esperar.

Cuándo dió la hora exacta salí de ahí camuflandome con el entorno, algunos me miraban raro y otros solo me ignoraban, mientras yo buscaba con la mirada a Renjun.

Al llegar a la salida caminé al auto de Renjun y me sorprendí cuándo no lo ví, habían dos opciones.
O lo robaron.
O Renjun se fue sin mí.

Pensé que quizás estaría en la tienda de la que habló pero no, no estaba.
Ya tenía dolor de cabeza por pensar tanto cuándo se me ocurrió llamarlo, ya tenía su número, sólo era marcar y ya.

-Deje su mensaje en el buzón de voz.

-Oh vamos, no tengo ni idea cómo volver a la casa de Renjun, jodete buzón de voz.

-Eres realmente un idiota Donghyuck.

-¿Renjun? ¿Eras tú?

-Sí ¿Dónde estás?

-Eso mismo iba a preguntar.

-Estoy en la cafetería donde trabajo, quedamos de juntarnos ahí.

-¿Enserio..?

-Sí, ¿Tú dónde estás?

Había olvidado que Renjun trabajaba, aquella cafetería estaba justo al frente mío,  pero el auto no estaba, supongo que la cafetería debe tener otro estacionamiento.  Realmente soy un idiota.

-¿Donghyuck? ¿Sigues ahí?

-Oh sí, ya voy para allá.

Colgué el teléfono y caminé a la cafetería,  Renjun estaba atendiendo una mesa, me acerqué a saludarlo y no podía creer quiénes estaban sentados en la mesa.

-¿Tú de nuevo?

-Donghyuck, hijo, debemos hablar

No, No pienso hablar con ella,  fingió que estaba muerto todos estos años. Y al lado estaba mi hermano, como si nada, destesto a esta familia.

-Vaya una junta familiar ¿No? Que lindo,  la madre, el hijo mayor y el menor, que sorpresa ¡Falta alguien! El padre, él no está.

Mi tono sarcástico molesto a mi hermano,  su cara era totalmente seria y mi madre contenía la tristeza en su rostro.

-De eso queremos hablarte