8. La renuncia

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-Sino te despido.

Miro a Chris a los ojos y suelto una gran carcajada.

-Jajajjajajajajja, eso sí me hizo reír, aaay- suelto un gran suspiro- me vas a matar de la risa.

-No le veo la gracia Lea, estar despedida no es divertido.

-Es que yo no estoy despedida, yo renuncié.

-No, eso no es verdad, usted no presentó ninguna carta de renuncia en mi oficina, por lo tanto usted no renunció, yo la despedí.

-¿Seguro de que no presenté mi carta de renuncia?

-Sí, muy seguro.

-Bueno que te parece si llamas a tu secretaria y le preguntas si hoy recibió alguna renuncia.

-Y que ganaría yo preguntándole eso a Lisa.

-Salir de la duda.

-No.

-¿No qué?

-No se lo preguntaré, además no me basta con solo esa recompensa, quiero más.

-Que ambicioso, tú solo quieres más y más.

-¿Que hay de malo en querer más?

-Te quedarás solo por ser egoísta y ambicioso. ¿Cuantos defectos más tienes? Espera no me respondas, bien, si tu secretaria no tiene la carta de renuncia pues yo regreso a trabajar.

-¿Y?

-¿Y qué?

-Y vendrás conmigo a un crucero el fin de semana, todo pagado.

-¿Que hay en ese crucero?

-¿Has escuchado que la curiosidad mató al gato?

-Está bien "señor misterio" o prefieres que te digan "señor enigma"

-El que más prefieras.

-Bien entonces será señor misterio, llama a "Lisa"

Después de casi diez minutos hablando con Lisa, concluimos en que ella no tenía ninguna carta de renuncia ni en su escritorio ni en el almacén de archivos, por lo tanto yo debía regresar al trabajo y pasar un fin de semana todo pagado en un crucero con Chris.

No suena a un castigo pero ahora tendré que soportar a Chris todas las semanas, de lunes a viernes, y agregarle dos días extra con Chris eso sí que es un castigo, conociendo su carácter no puedo creer que antes haya tenido una novia.

Entonces es ahí cuando se me ocurre la grandiosa idea de revisar mi bolso, y ahí está, mi carta de renuncia, la que le debí haber dado a Lisa días atrás para librarme de Chris de una vez por todas, aunque debo admitir que me hace un poco feliz no haberla entregado, porque mirándole el lado bueno un fin de semana, en un crucero, todo pagado, es genial, claro quitando a Chris todo sería perfecto.

-Ahora debes cumplir con nuestro acuerdo.

-Ya lo sé, que te hace pensar que no lo haré.

- Si antes no cumpliste con el contrato que tenías con la empresa, para mí, es razón suficiente para no confiar en ti.

-Pero esta vez sí cumpliré mi palabra.

-Ay Lea no me hagas reír.

-No le veo la gracia.

-Así como yo no le veía la gracia a tu "renuncia", y ya ves resultó que no habías renunciado.

-Muy gracioso Chris- pongo los ojos en blanco.

-Ya deja de hacer eso pareces una niña pequeña.

Solo para molestar a Chris vuelvo a poner los ojos en blanco.

-Espero que se te caigan los ojos de tanto hacer eso.

-Yo también, aunque no estoy muy segura de cómo...

La escena pasó de un Chris soberbio, mirando su teléfono esperando la respuesta de Lisa, a un Chris romántico y sexy que me roba un beso, así, sin más.

-¿¡Que te pasa?!

-Si crees que me voy a disculpar contigo por haberte robado un beso estás equivocada. Pídeme perdón por lo que hiciste.

-¿Porque yo te pediría perdón? No fui yo la que te robó un...

Y volvió a robarme otro beso.

-Pídeme perdón.

-Estás loco- pongo los ojos en blanco, y me volteo para intentar entrar a casa, pero Chris pone su mano en la puerta evitando que la abra y me voltea hacia él.

-Te dije que no hicieras eso.

Volvió a besarme, pero este beso fue diferente a los anteriores, fue más fuerte, me mordió los labios, este beso se sintió como si Chris lo hubiera estado esperando con ansias, como si yo le gustara.

Ya llevamos casi un minuto y él no está dispuesto a despegarse de mí, suelto un suspiro, y Chris abre los ojos, se separa de mi, y me empuja contra la puerta, con una de sus manos sujeta las mías hacia arriba, las sujeta con fuerza, y con la otra me agarra de la cintura, pegándome hacia él, me mira fijamente a los ojos, abre un poco sus labios.

Para serles sincera pensé que aquí venía otro beso, así que me acerqué a él, abrí un poco los labios y cuando estaba a punto de besarlo, me suelta, y me vuelva a empujar contra la puerta, pero esta vez sin agarrarme de la cintura.

-¿Que estás haciendo Lea? Mira, creo que te confundiste de persona, yo no soy ese tipo de jefes que chantajea a sus empleadas, pidiéndoles besos, para ascenderlas.

-¿A no? ¿Entonces qué tipo de jefe eres? ¿Uno que seduce a sus empleadas y luego les hecha la culpa de lo que pasó?

-Nos vemos mañana Lea.

-Bien.

¿Porque lo estoy dejando ir? ¿No se supone que debería decirle algo sobre lo que acaba de pasar?

Al día siguiente fuí al trabajo, obvio las cosas entre Chris y yo están un poco raras después del incidente de ayer, hoy hubo una junta directiva y en toda la reunión no me miró ni una sola vez, aún sigo sin entender cómo puede ser tan frío de repente.

Después de la reunión me dijo que vaya a su oficina con urgencia, según él es importante, pero por lo poco que lo conozco, la palabra "importante" para Chris es quiero un café, quiero comer, o prende la luz, es un tanto irritante, pero un trato es un trato y me guste o no, debo cumplirlo.

-¿Porque demorabas tanto Lea?

-Perdón jefe, es que tenía que entregarle unos documentos a Lisa para que los guarde en...

Yyy lo volvió a hacer, sí, me besó de nuevo, enserio como puede ser tan frío y luego tan, tan, tan cariñoso.

-Moría por volver a besarte.

-Así que esta era la cosa "importante", si eso era todo tengo cosas realmente importantes que hacer.

-¿Estás bien?

-Si, porque lo preguntas.

-Es que ayer, olvídalo.

-Bien, con permiso.

-Ok

Muy bien Lea, bien hecho, eso le pasa por haberme tratado como el mismísimo Polo Norte.

Si no salía de ahí, estoy segura de que iba a terminar cediendo.

*

Nota de la autora:

Y como todos lo pidieron un nuevo cap.
No es cierto nadie lo pidió, pero igual lo subo xd

Muak 😘💋

Mi querido CEO ® Where stories live. Discover now