Niño zombie [JiKook]

□ 04 □

El sol empezó a salir, dando un hermoso saludo mañanero a la pareja en su castillo, ambos desde esa madrugada estaban haciendo reparaciones en el castillo, era algo bastante importante pues tenían que evitar tener cualquier abertura en este y volver a poner trozos de plata en los espacios abiertos, se preguntarán el por qué y la razón era simple: vampiros.

Esta extraña raza de personas muertas habían aparecido desde hace milenios y justamente el castillo de los Archer's había sido hecho específicamente para evitarles la entrada. Según le gente estos eran seres castigados por la mano de Dios, personas que en vida cometieron horribles delitos que los llevó a esa horrible resurrección.

Claro que esa solo era la creencia de los cristianos y creyentes en dioses, la ciencia decía otra cosa, todavía no lograban encontrar el cómo de su llegada ni el por qué pero algo seguro es que el hogar de las personas debía ser de plata para poder estar a salvo en las noches de aparición de estos seres, y como antes dicho el castillo Archer rebosaba de éste susodicho, mas, con los años fue decayendo la construcción, era posible vivir pero tenía algunos blancos fáciles para la entrada de los vampiros.

Gracias a ello la pareja junto a algunas personas de construcción estaban arreglando y remodelando el lugar, no era la gran cosa pero por lo menos estaría en pie varios años más.

La ciencia también decía que todas las personas debían tener una estaca y ciertas armas en su casa para protegerse de la llegada de los seres, ante ello JiMin tenía aparte de la estaca también una pistola con balas de plata, todo por proteger a su familia y a él.

El bebé estaba ya a un mes de nacer y él prefería evitar cualquier incidente, desde el día en que "resucitó" a Jungkook hasta ahora los paparazzis y demás gentuza según el castaño iban desapareciendo, y ambos agradecían eso ya que muchas veces estuvieron más que estresado con la gente que no dejaba de golpear la gran puerta de entrada, llegando a romperla una vez, fue un incidente para nada agradable y por poco Jungkook salió lastimado gracias al tumulto de gente jalandolo y empujándolo. Después de ese día JiMin decidió hacer más resistente su pequeño gran castillo y poner una puerta mucho más gruesa y dura de romper.

Algo de lo que no se dio cuenta el pelirojo fue que había dejado una gran abertura en la parte trasera del castillo y por ahí fácilmente podían entrar los vampiros. 

...

–¿Ya terminaste?–a punto de quedarse dormido estaba Jungkook, la baba estaba callendo lentamente por su barbilla y él estaba cabeceando para no sucumbir ante su gran dios del sueño, Morfeo.

–Me falta poco, bebé. Solo espera un poco más.–suplicó tranquilo el rojizo, aún tecleando en su computadora para terminar el bendito informe sobre Jungkook, le molestaba hacerlo pero era por un bien mayor y ese era el de sus pequeños. Jungkook estaba a punto de tener a su primer bebé y ambos estaban tratando de conseguir todo.

Un dato muy útil que ellos dieron fue: compra las cosas antes, te evitas muchos problemas y apuros.

Esto fue gracias a la gran pereza de ellos en los primeros meses, estos se habían absorto en su propio mundo que en el mes ocho apenas y tenían la cuna, peluches y algunas ropitas tanto femeninas como masculinas, ellos prefirieron no saber el sexo del bebé hasta que naciera así que aunque no lo aceptaran tenían más trabajo por delante, aunque eso no les molestó demasiado, tenían demasiada confianza.

El reloj marcó las 10 p.m., una hora bastante tarde para la pareja.

–Kook... Jungkookie~ despierta, no puedes quedarte dormido ahí, vamos a la cama.–Dejó un besito en sus párpados y acarició la cabellera del menor con amor, este hizo una pequeña mueca y abrío los ojos con pereza para luego levantarse, tomar la mano de JiMin y jalarlo hasta la cama de ellos.

En medio del camino a la habitación, de fondo se escuchaban unos relámpagos, algo que asustaba mucho a Jungkook, por lo que en todo el camino estuvo demasiado apegado a JiMin y el otro no se quejaba, le daba mucha ternura y amaba eso de su pareja, la pancita ya de un tamaño de un pequeño melón se apegaba bastante a él y eso le encantaba.

Ya en la cama ambos estaban con ropa cómoda, el castaño tenía su camiseta hasta el pecho pues como era de costumbre JiMin tenía la manía de decirle muchas palabras bonitas al bebé antes de dormir, y sin duda también le daba muchos besitos. En un momento normal Jungkook estaría riendo con ternura por sus ocurrencias y también estaría hablando y dándole besitos al bebé, claro que primero los pasaba a su mano y luego a su pancita, esta noche él estaba ya en el mundo de Morfeo apenas tocó la cama, se notaba incluso con el hilo de baba que le bajaba por su barbilla.

–Buenas noches, cariño.–finalizó el pelirojo dejando un besito en la frente de su amado, al igual que bajaba su camiseta y se acomodaba para acurrucarse en el regazo de el menor, no eran una pareja normal, eso estaba ya claro.

Pasaron algunas horas, básicamente ya era madrugada y justamente el día 14 de febrero, ese día en la tarde JiMin y Jungkook iban a tener al bebé, decidieron hacerlo por cesárea y así no hacer sufrir algún daño grave a Jungkook por su cuerpo débil. Lejos se escuchaban algunas risas pero eso no le tomó importancia Jungkook, él se había levantado para tomar su jodida agua.

En el proceso, aun somnoliento logró escuchar unos extraños sonidos, pasó unos pasillos bastante oscuros para lograr llegar a la gran cocina y tomar su agua. En su camino de vuelta logró ver algo extraño moverse entre la oscuridad, extrañado miró ese punto durante unos minutos pero al no notar nada volvió a su camino. Repentinamente fue tomado del cuello y pegado con brusquedad contra la pared, asustado miró a su atacante, notando al poco tiempo que era un vampiro por sus brillantes y ojos rojos. Este sonrió con malicia, empezando a olisquear el cuello de su presa, bajando con lentitud hasta su gran vientre.

–Vaya... va a haber un doble festín aquí.–rió malicioso y volviendo su mirada al castaño.

Un grito desesperado resonó por toda la construcción, y el cuerpo de Jungkook cayó al suelo en un brusco sonido el cual despertó a JiMin.