Epílogo

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Las historias de amor no siempre tienen finales felices, hay veces en las que la vida nos golpea y nos deja en el piso, pero de esos momentos en los cuales somos más débiles y vulnerables es cuando resurgimos de nuestras cenizas como un ave fénix.

La historia de amor de Nathaniel y Cassie es ante los ojos de los demás una trágica historia como Romeo y Julieta, sin embargo en esta historia Romeo perdió a su Julieta, condenado a vivir sin el amor de su vida, Cassie murió amando a Nathaniel y Nathaniel vivirá amando a Cassie.

Pueden pasar los años pero el primer amor nunca se olvida y como todos sabemos Cassie fue su primer amor, en otro mundo sus almas volverán a estar juntas teniendo su vivieron felices pero en este mundo él no consiguió su final feliz.

Nathaniel está perdido sin la luz que lo guiaba en la oscuridad ¿Cómo se sana un corazón roto en mil pedazos? ¿Algún día volverá a amar con la misma intensidad? Aquellas dichosas preguntas siempre circulaban por la mente de Nath, déjenme decirles que chicas detrás de él ha tenido miles pero para él nunca habrá nadie como ella.

Han pasado cinco años desde que se despidió para siempre de su primer amor, han pasado cinco años desde que renunció a un final feliz, han pasado cinco años y nunca dejo de amarla.

Dicen que los humanos somos polvo y cuando morimos volvemos a nuestro estado original.

—Deja de divagar en tus pensamientos Nath —dijo alguien en su oído.

Nathaniel se sobresalto ya que estaba concentrado en las miles de preguntas que rondaban por su cabeza.

—No me asustes así Evan —dijo Nath mirando a su primo.

—Vamos debemos ir al hospital a ver a Emi —dijo Evan sonriendo.

Emi estaba embarazada y hoy había dado a luz, lo cual a Nath no le hace muy feliz ya que es el quinto año desde el fallecimiento de Cassie y él quería ir al cementerio.

—Ya lo sé ¿Crees que sea niña o niño? —pregunto Nath curioso.

Evan se encogió de hombros y ambos se dirigieron al hospital.

Cabe destacar que ambos habían vuelto hace un año después de terminar sus carreras universitarias.

Evan había decidido no abandonar a su primo por ese motivo se inscribió a la misma universidad que él.

Cuando llegaron al hospital vieron a los demás chicos.

—Felicidades ya eres padre —dijo Nath sonriendo a un Zack muy nervioso.

Zack y Emi nadie se lo esperaba, pero después de la muerte de Cassie ambos buscaron refugió en los brazos del otro con el tiempo el cariño de amigos se volvió algo más.

—Estoy nervioso siento que voy a vomitar y ni siquiera soy yo el que está dando a luz —dijo Zack riendo.

—Chicos ya pueden ir Emi ya está en su habitación con el bebé —dijo la señora Finnegan sonriendo.

A los señores Finnegan cuando perdieron a su pequeña todo su amor se dirigió hacia Zack, como una familia superaron la época difícil dónde sentían que el mundo se les caería encima.

Zack, Evan,Nath, Dennis y Carl quiénes llegaban con una sonrisa se dirigieron hacia la habitación de Emi.

—Odio los hospitales —dijo Carl tomando la mano de Evan.

El amor de ellos nunca se marchito, ambos sabían que eran el uno para el otro.

—¿Es niño o niña? —pregunto Nath a Zack quien le ignoró.

—Ni yo que soy el padre lo sé —dijo Zack negando con una sonrisa.

Todos se rieron y cuando llegaron a la habitación Zack los hizo callar para no molestar a Emi.

—Hola preciosa —dijo Zack sonriendo acercándose a ella.

Emi tenía a un bebé en brazos y lloraba de felicidad.

—Les presento a Cassandra —dijo  sonriendo.

La habitación se quedó en silencio, hasta que las lágrimas de Nathaniel se hicieron presentes.

—¿Cassie?  —pregunto Dennis con lágrimas en los ojos.

Evan y Carl se acercaron hacia el bebé sonriendo con lágrimas en los ojos.

La muerte de Cassie es algo que nadie superará y siempre estará dentro de ellos.

—Muchas gracias Emi —dijo Nath caminando hacia la camilla.

—Ella siempre será mi mejor amiga y es por eso que quería que mi hija tenga su nombre, el nombre de una persona increíble que siempre la cuidará y guiará —dijo Emi con lágrimas en los ojos.

Nathaniel beso la cabeza de la pequeña y se despidió de ellos.

Él tenía que ir al cementerio, tenía que contárselo a Cassie

Cuando llegó se dirigió hacia la tumba de Cassie, aún con lágrimas en los ojos, tocó su tumba y por segunda vez después de cinco años sintió que Cassie estaba ahí.

Sintió su corazón llenarse, se sintió completo, se sintió en paz.

Y es que eso era algo que Cassie siempre causaría en él.

Ella quería que Nathaniel fuera feliz, lo había visto llorar siempre que iba a verla, había visto la culpabilidad en su rostro, aunque ella no estaba viva para abrazarlo su alma siempre estará con Nathaniel.

—Te amo —dijo Nath en la tumba.

La tumba de su primer amor, la tumba de la primera persona que dijo te amo, la tumba del amor de su vida, la tumba de su para siempre.

En ese momento Nathaniel la vio, quizás fue su imaginación, quizás estaba perdiendo la cabeza pero la vió, la hermosa sonrisa de Cassie que lo miraba feliz, lo miraba orgullosa.

—Siempre te amare —dijo Nath mirando hacia ella.

La figura de ella se desvaneció con una sonrisa, pero para Nath ese pequeño momento fue suficiente para sonreír.

El amor es el miedo más hermoso que pueda existir porque nos enfrentamos al rechazo por parte de la persona que amamos pero cuando es correspondido es el sentimiento más bello del mundo.

Y quizás algún día Nathaniel encuentre a alguien más pero para él no es importante enamorarse ya tuvo su historia de amor y es algo que él nunca dejará de contar. Nunca dejará de decir que se enamoro perdidamente de Cassandra Finnegan.

N/A

Quiero agradecer por haber llegado hasta aquí, muchas gracias por todo el apoyo que le dan a mis historias, espero disfruten de este capítulo tanto como yo disfruté escribiéndolo.
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También estoy escribiendo dos nuevas historias, una de ellas se llama Melody y otra Ordinary Girl, quería saber su opinión, si público ambas novelas ¿Contaría con vuestro apoyo? Espero vuestras respuestas! Muchas gracias por acompañarme durante este camino.

¿Novios de Mentira?Where stories live. Discover now