where everything is soft || l.s.

needy

Es una mañana fría, incluso un poco más de lo normal. La llegada del invierno se hace cada vez más presente conforme pasan los días. Harry despierta con su conejito blanco en brazos. Instantáneamente se percata de que Louis no está en la cama y comienza a preocuparse, el calor de sus brazos le hace falta para poder sentirse seguro, en calma.

Suelta un gemido bajito, esperando que Louis pueda escucharlo y vaya a rescatarlo. Sin obtener una respuesta, Harry se sienta en la cama y suelta quejidos un poco más fuertes, entrando en pánico al no tener la presencia de su Lou.

"¿Papi?" pregunta Harry abrazando fuerte a su conejo blanco, ahelando una respuesta con lágrimas formándose en sus ojos. El silencio de la habitación se interrumpe cuando Louis sale del baño del dormitorio vistiendo su ropa del trabajo. Cuando ve que Harry está llorando en silencio, no puede evitar preocuparse. Se acerca a su pequeño y, con una voz suave, lo saluda.

- Hola Hazz ¿Mi pequeña princesa ya despertó? Ven aquí - dice abriendo los brazos. Harry se acerca a Louis hasta terminar en su regazo, siendo arrullado por la suave voz de su novio y el leve vaivén de sus piernas. - Ya no llores gatito ¿Te asustaste porque no viste a papi?

Harry no encuentra más que asentir con la cabeza y limpiarse las lágrimas con los puños cerrados. Toma respiraciones profundas y se limpia las lágrimas con los puños.

- No te preocupes, aquí estoy. - afirma Louis y le da un beso a Harry en la frente.

- ¿No te vas a ir, verdad papi? - pregunta Harry con un dejo de esperanza.

- Sabes que papi debe trabajar hoy princesa, también sabes qué debes hacer mientras vuelvo.

Harry suspira profundamente ante la idea de tener que dejar su little space mientras Louis regresa, aunque sabe que es por su propia seguridad. Siente cómo su espalda y su cabello son acariciados por un par de suaves manos y desea quedarse en ese momento por el resto del día.

- Harry, sé bueno para papi y sé grande.

- No quiero.

Louis se queda anonadado ante la respuesta de su novio y sin más detiene las caricias que le hacía hace unos segundos. Mueve sus manos lentamente al mentón de Harry, haciendo que éste levanté la mirada.

- Entiendo que necesitas esto, yo también lo hago, pero no puedo dejarte sólo de este modo. Tú sabes por qué.

Los ojos de Harry se llenan de lágrimas al escuchar las palabras de su novio, entiende perfectamente sus razones, pero sigue siendo doloroso salir de su zona de confort. Con el dorso de la mano se limpia las pequeñas lágrimas de sus mejillas. Finalmente suspira sin encontrar mucho que pueda hacer y asiente.

- Ese es mi niño bueno ¿Por qué no vas a darte una ducha? Me iré cuando termines.

Se talla los ojos para soltar un suspiro, definitivamente no quiere salir de su cálida y cómoda cama, mucho menos de los brazos de Louis, pero sabe que es lo correcto. Cuando finalmente reune la suficiente voluntad, se levanta de la cama y camina lentamente al baño.

- Te esperaré en la sala Hazz, no tardes demasiado ¿Ok?

Harry responde un "sí" por lo bajo y cierra la puerta del baño. Se quita la pijama lentamente y, una vez estando desnudo, abre la llave de la regadera para ducharse. Antes de entrar, se percata de la pequeña canasta con juguetes para la tina. Por un momento, algo dentro de si mismo algo le suplica que llene la tina con burbujas y juegue un momento con los peces y botes de plástico, pero hoy no es el momento indicado para ello. Saca el pensamiento de su cabeza y se dispone a bañarse sin tomarse mucho tiempo.