Amor Corrupto (Itadori/Sukuna Y Tu)

Capítulo XXII - Princesa Enferma

-Creo que tienes algo que me pertenece - dijo Sukuna mientras buscaba algún Yukata decente -

-Cierto - rompí el peluche y entre el relleno busque el dedo -

-Tenemos que ir por el resto... - tomo el dedo y lo comió -

-Iré por ellos no tienes que preocuparte por eso... Te serviré, siempre y cuando me permitas estar a tu lado - me arrodille frente a él e hize una reverencia -

-Muy bien - sonrió complacido -

Ambos dejaron un sendero carmesí, a su paso podrían terminar con esto rápidamente pero eso no era divertido además el sexo los distraía bastante de sus objetivos.

Y esta no era la excepción, acababan de masacrar a toda una comunidad ambos estaban cubiertos de sangre y rodeados de cadáveres.

-Muévete.... Más! - gruñio Sukuna mientras te sujetaba de las caderas -

Entusiasmada por las palabras de su amante, la chica siguió moviendo sus caderas de arriba - abajo enérgicamente, antes de que pudieran alcanzar el clímax por tercera vez, él decidió cambiar de posición dejándola boca abajo volviendo a penetrarla sin compasión o cuidado alguno, la movió más rápido sobre su miembro mientras que sus manos estrujaban los senos de la chica, no dejó que separara hasta que el terminará podría hacerlo día y noche pero su compañera ya parecía estar exhausta...

(...) se encontraba aun boca abajo respirando agitada, Sukuna la jalo del cabello para acercarla a el y la beso con brusquedad, antes de romper aquel beso mordió su labio provocando que sangrar a un poco, lamio la sangre gustoso y sonrió orgulloso.

-Parece que ya puedes aguantar un poco más mi ritmo - hablo Sukuna orgulloso mientras acariciaba tu cabello -

-Lo haré mejor en la siguiente ocasión - respondí mientras cerraba los ojos -

Japón Antiguo - Edo

Hija de una prostituta fue vendida a una familia de consejeros del shogun quienes después de varios intentos nunca lograron concebir algún hijo por lo que terminaron comprando a una niña... Su arrogancia era lo único que superaba su belleza, solían llamarla la princesa enferma.

-Ellos se la llevarán a ella, tienes que matarla... Eliza - hablo una sombra que rodeaba a la pequeña pelirroja -

-Pero ellos dijeron que nos llevarían a ambas, además es mi hermana -

-Entonces te quedaras aquí a morir como el resto?... Como tu madre, teniendo que satisfacer los más bajos instintos de los hombres - hablo de forma burlesca aquella sombra - Hazlo! Matala y salgamos de este asqueroso lugar -

Su hermana murió de forma sospechosa al aparecer había dejado de respirar mientras dormía.

Era el sueño de cualquier hombre y la envidia de todas las mujeres de Edo, pelirroja, de facciones delicadas, piel pálida y poseedora de un lunar en la barbilla era lo que más la caracterizaba.

-Entonces porque no lo deciden con una pelea, quizá salga con el que gane - río divertida la pelirroja -

Ambos chicos pelearon con espadas de madera para evitar hacerse daño, pero eso era aburrido lo divertido era cuando realmente se derramaba sangre por ella, terminó contrayendo matrimonio con la mano derecha del shogun... Grabe error con la caída del shogun sus allegados también cayeron tuvo que observar como a su esposo lo obligaron a cometer sepukku y a ella le cortaron la garganta frente a sus pequeñas gemelas... Incontables fueron las vidas que se perdieron por su culpa por eso quedó maldita y sus futuras generaciones también fueron envenedas por esos sentimientos que ella sembró.

En su línea de descendientes siempre darán a luz a gemelas una de ellas la que sea bendecida con su belleza cargará con aquella maldición, muriendo en soledad y de una forma horrible.

Era actual - Kyoto

(...) aún estaba descansando en el regaso del rey, quien no se había movido en ningún momento mientras ella descansaba

Abrí los ojos lentamente - Es una molestia ver los recuerdos de las demás - susurre -

-Al parecer tenemos visitas -...

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