SEX DOLL ♡ minsung / hanknow

Epílogo

☆ ☆ ☆

JiSung sonrió, sus mejillas ardían y sus manitas se deslizaron por la espalda ajena, tocando la piel expuesta. Sus piernas rodearon la cadera del mayor y gimió feliz cuando MinHo mordió su cuello suavemente antes de depositar un besito.

—Te amo, Honnie.

—Y yo a ti, Hannie, demasiado.

Rieron contra la boca ajena e inició un ósculo lento y delicado. Se retiraron la ropa de a poco, sus dedos rozando la cálida carne bajo éstos, sus gemidos ahogándose en la lengua del otro.

—Oh, MinHo... —suspiró cuando el mayor se introdujo en su interior.

—¿Estás bien, cielo? —preguntó conteniendo las ganas de arremeter contra el cuerpo ajeno, queriendo hundirse más profundo una y otra vez hasta escucharle gritar su nombre mientras se entregaba a él.

—Mejor que nunca.

Sus bocas hambrientas se encontraron por milésima vez, las estocadas lentas empezaron y pronto JiSung jadeaba al ritmo de MinHo, los dos perdidos en las sensaciones que tanto extrañaron, sus cuerpos fundiéndose hasta ser uno mismo y palabras susurrándose que solamente ellos conocerían aquel momento.

Lee presionó un poco más la cintura de Han, quien se mordía el labio inferior bajo suyo, antes de dar una embestida más dura. El pelinegro arqueó la espalda, entrecerró los ojos y abrió la boca, quedándose sin aliento.

Mantuvieron el mismo ritmo: Calmado, empalagoso y caliente, de vez en cuando Lee propinaba un vaivén más peligroso y fuerte, pero sólo eran unos cuantos segundos hasta volver a lo mismo.

Era suficiente, más que suficiente.

Invirtieron posiciones, ahora MinHo estaba contra la cama mientras JiSung lo montaba con lentitud y paciencia, meciéndose de adelante hacia atrás, dando ligeros saltitos para tomar su pene más profundo.

—Hyung... —llamó Han. La piel canela brillaba con el sudor recorriendo su rostro, sus cabellos negros desordenados, el carmesí en sus mofletes abultados y el rojo intenso de sus labios le hicieron lucir perfecto—. V-Voy a-...

—JiSung...

Han arqueó la espalda nuevamente, echó la cabeza hacia atrás. Antes de tocar el cielo con sus dedos y rendirse ante el éxtasis, MinHo le dio vuelta, dejándolo de espalda sobre las sábanas con las piernas separadas y sobre sus hombros. Volvió a embestirlo, manteniendo esta vez el vaivén acelerado y tosco, robándole gemidos, mordiéndole la boca, lamiendo su cuello y acariciando su miembro.

Un hilo de saliva descendía por los labios de Han, trazándose en su mandíbula. Las lágrimas de placer hicieron relumbrar sus ojos y comenzó a quejarse entre sollozos, queriendo su liberación pronto.

—Córrete, bebé —gruñó MinHo en su oído, arremetiendo más fuerte— Mi amor, te amo tanto.

Las tiras de esperma mancharon ambos abdómenes y parte del rostro de JiSung. Fue el orgasmo más intenso y dulce de su vida, su cuerpo sufrió espasmos y gritó el nombre de MinHo, repitiéndole que lo amaba, arañando su espalda y jalando sus cabellos.

El castaño no tardó en llenar a JiSung pronto, mordiendo sus labios y penetrando fuerte. El semen caliente hizo sentir a Han satisfecho, dejándolo sonriente bajo el cuerpo de su novio.

—Uhm, siempre es tan bueno...

El mayor rió sobre el cuello del más pequeño. Salió de su interior y lamió el estómago del menor, su lengua trazando un camino de saliva sobre la esencia de JiSung.

—¡M-MinHo! —chilló avergonzado, dándole un pequeño golpe en la cabeza—. No hagas eso ahora o voy... Voy a...

—¿Vas a? ¿Qué? —sonrió sin pena alguna, acercando sus rostros y besando su nariz.

—Voy a c-comerte entero —jadeó frustrado—. Tenemos que irnos, hyung, nuestros padres nos esperan.

—No vayamos, por favor, quedémonos aquí todo el día.

—No podemos faltar, hyung, ¿qué clase de persona no participa en los preparativos de su boda? Tenemos que hacer muchas cosas, levántate.

—Pero ChangBin y SeungMin ya se encargarán de eso.

—No estaría tan seguro, sabes que los cuatro a veces se ponen como locos y pierden el tiempo en alguna orgía. Hyung, en serio, vamos.

—Qué mal —dramatizó dejándose caer a su lado, con el rostro contra la almohada y un tono de voz fingido—. Yo quería ser el que reciba ahora...

—¿Lo dices en serio?

—Completamente.

JiSung observó el reloj de al lado, suspiró y pronto estaba detrás del mayor, mordiendo el lóbulo de su oreja y masturbándole con paciencia. MinHo gimió y separó las piernas al instante, alzando las caderas y suponiendo que se había salido con la suya, JiSung sonrió divertido mientras le enseñaba dos de sus dedos, los cuales el mayor comenzó a chupar como una paleta.

—Supongo que pueden esperar un poco, ¿verdad?

En donde Han JiSung define a su tipo ideal en una página de muñecos inflables, sin imaginar que este aparecería en su puerta días después, sin embargo, en carne y hueso.
O, en donde Lee MinHo es un chico demasiado impaciente, pero malditamente ingenioso.

Y... En donde Han JiSung y Lee MinHo encuentran el amor real al fin.

☆ ☆ ☆

n.a

Y eso es todo, oficialmente♡.

Exceptuando los especiales, claro.<3