Capítulo 15. Cosas que no deben ser

155 43 22
                                    

Cassie acompañó a su madrastra a LTec entre sonrisas y buen ambiente, ambos hermanos se sorprendieron de verse en ese lugar, Keith no podía entender como habían cambiado las dos de la noche a la mañana, ¿qué demonios había pasado entre ellas?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cassie acompañó a su madrastra a LTec entre sonrisas y buen ambiente, ambos hermanos se sorprendieron de verse en ese lugar, Keith no podía entender como habían cambiado las dos de la noche a la mañana, ¿qué demonios había pasado entre ellas?

Después del trabajo, Annya lo invitó para ir todos juntos a un restaurante italiano. Durante la cena, averiguó lo sucedido, topándose con que ella asistió a la escuela de Cassie.

 No le gustaba como estaban yendo las cosas, su hermanita ahora se veía muy apegada a su "nueva madre", su actitud cambió drásticamente, de ignorarla completamente pasó a verla casi como un ser divino, tenía que hablar seriamente con Cassie

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No le gustaba como estaban yendo las cosas, su hermanita ahora se veía muy apegada a su "nueva madre", su actitud cambió drásticamente, de ignorarla completamente pasó a verla casi como un ser divino, tenía que hablar seriamente con Cassie.

.......................................................................................................................

Esa noche, Keith fue a visitar a su hermana antes de dormir, cuando entró a su habitación, ella ya estaba en pijama, cepillando su negro cabello frente al espejo.

Esa noche, Keith fue a visitar a su hermana antes de dormir, cuando entró a su habitación, ella ya estaba en pijama, cepillando su negro cabello frente al espejo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

 — Hermano, ¿qué te trae por aquí?— inquirió sonriente la pequeña.

— ¿Qué estás haciendo?

— ¿De qué hablas?

— Con Annya... ¿Qué estás haciendo?— cuestionó.

— Nada... ella es una buena persona, me agrada.

Sobrevivir al matrimonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora