Conviértete en humano. (Eremika)

La historia de la creación.

§

Hace mucho tiempo la humanidad estuvo al borde de la extinción debido al único depredador por encima de ellos: Los titanes. Seres gigantescos los cuales comían a las personas como si fueran animales. Las defensas humanas no eran comparables a la fuerza de los enemigos, tanto era así que la mayoría de la especie quedó extinta de la faz de la tierra. Los últimos humanos que habían logrado sobrevivir al ataque de aquellos demonios fueron obligados a vivir en gigantescas murallas las cuales protegerían a la población de todo ataque. Estas defensas eran: Rose, Sina y María, nombradas en honor a las hijas del rey.

Pero aunque esta historia encaja hay otra alternativa un poco más oscura y cruda. La verdad es que la humanidad jamás estuvo al borde de la extinción, fuera de aquellos muros impenetrables la humanidad vivía cómodamente y con una tecnología mucho más avanzada que la que cualquier habitante de la muralla podría imaginar en su vida. Transportes aéreos, edificios de defensa, armas y cañones anti titanes, defensas y blindaje de la mejor calidad. Incluso tenían consigo el poder de los titanes cambiantes, una clase por encima de los descerebrados caminantes y excéntricos los cuales tenían habilidades dadas por su nombre.

Titán hembra, una gigantesca mujer que tiene la habilidad de endurecer su cuerpo. Titán acorazado, un tanque de guerra pesado pero muy resistente y fuerte. Titán bestia, un gigante peludo que tiene la habilidad de algún animal. Titán de carga, un poco agraciado carguero que puede llevar consigo una gran cantidad de peso. Titán mandíbula, un rápido depredador el cual puede despedazar a sus enemigos con sus dientes. Titán colosal, un coloso de más de sesenta metros, lento pero casi imposible de eliminar debido a su tamaño. Titán martillo de guerra, un elegante soldado el cual tiene la habilidad de generar cualquier tipo de arma con su cuerpo.

- Y finalmente... Estoy yo. Titán de ataque, un gigante de quince metros el cual cuenta con una fuerza superior a todos.
- Wow...

Mikasa se quedó sorprendida. Habíamos escapado de las murallas en la mañana y ya estábamos bastante lejos, ocultos en el bosque. Lo único que iluminaba nuestros cuerpos era una fogata la cual había encendido con mucho esfuerzo ya que no estaba acostumbrado a hacer algo así.

- Entonces... ¿Hay más gente al otro lado del mar? ¿Y esa gente... Son nuestros enemigos?
- Lastimosamente así es. Tenemos no solo a todos los titanes cambiantes en nuestra contra, sino también a toda una nación humana. Ellos pueden destrozar mí cuerpo con su equipo anti titán, así que sería inútil intentar atacarlos solo con eso.
- ¿Entonces que haremos?
- Honestamente... No lo sé. Huí por impulso, porque en mis visiones quedarme en las murallas solo traería una gran peligro ha mis seres queridos. Es por eso que no traje a Armin conmigo, si el se queda allí seguramente esté a salvo.

Dicho eso observé la fogata y las chispas que esta lanzaba, luego observé mí brazo y noté unas pocas venas las cuales se habían marcado debido a haber cargado la roca hace unos días.

- Aunque, hay algo que sí tenemos de nuestro lado.
- ¿Qué es?
- Es... El Titán fundador, también llamada coordenada.

Mikasa se acercó más a mí para ponerme atención a lo que iba a decir.

- Este es el poder para crear y controlar titanes, con el podemos hacer que todos estos que están repartidos por el lugar nos obedezcan y usarlos como un ejército.

Dije mientras cerraba mí puño con fuerza y observaba las chispas de fuego volar en el aire.

- El problema es que hay otro usuario con esta habilidad, eso provoca que el efecto del Titán fundador sea reducido a la mitad. Pero si logro hacerme con ambas partes del fundador entonces podré controlar incluso a los titanes más gigantescos.
- Entonces... Nuestra misión por el momento es hacernos más fuerte ¿No es así?
- Debe ser así si no queremos morir en el primer paso. Yo... Debo encontrar y devorar a todos los titanes cambiantes para obtener sus habilidades.