Dear Lover

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Veamos.... Quise ir a donde él fuera, dejé que tomara el control y me dejó atrapada dentro de mis propios sentimientos.

¿Qué voy a hacer al respecto? Nada, absolutamente nada.

Y es que tampoco pretendo hacer que vuelva a mis brazos luego de fingir estar deprimida. Porque no, como dato curioso, no estoy deprimida. Creo que de hecho es todo lo contrario.

Estoy muy feliz.

O bueno, tampoco tan feliz pero tampoco deprimida. Claro que me ilusioné, y estaba muy feliz porque supuse que algo nuevo comenzaba entre nosotros.

Pero si no se dio así no puedo tirarme a morir, las cosas suceden porque sí. Algo bueno debe venir a mi vida.

Así que me voy a dedicar a disfrutar del momento que atravieso en mi carrera en lugar de deprimirme porque un idiota italiano se llevó mi virginidad y luego simplemente se deshizo de mí.

No soy una de esas.

No pretendo ser la chica buena que se deprime por algo tan estúpido. ¿Duele? Por supuesto que sí. 

Pero, ¿y que? No es la primera ni la última vez que me rompen el corazón.

Mamá me advirtió, dijo que esto podía suceder pero no escuché, así que supongo que me lo merezco por estúpida. Eso ya no funciona conmigo.

—Solo quiero felicitarlos, decir que estoy muy orgullosa de ustedes, y que realmente están arrasando con el nivel de audiencia que han conseguido en su primera semana de estreno. El mundo comienza a interesarse en ustedes y ya existen cuentas fandom. Señores, lo lograron.

—¿Eso significa que...? —Valentina deja de revisar su teléfono para mirar a Pamela. Ella sonríe.

—La segunda temporada comienza a ser grabada el día de mañana.

Los gritos de felicidad de todos se escuchan, miro mis uñas esperando que se seque ya. Claro que esto me hace feliz, pero yo ya lo sabía y ya celebré como una idiota anoche.

Según sé, necesitaban mi confirmación, la de Asher y Ruggero para dar el aviso el día de hoy, supongo que ya todos definitivamente aceptaron.

Yo ya firmé mi contrato esta mañana, ahora todo está bien. Y estoy orgullosa de ello.

Por eso decía que lo mejor era concentrarme en esto y no en Ruggero viéndome la cara de estúpida.

Salud por eso.

Los abrazos de felicitaciones comienzan, me río cuando Valentina me arrastra al abrazo grupal. Y entonces yo solo suspiro.

—Felicidades, hermosa.

Suelto un gritito de sorpresa cuando Asher me levanta entre sus brazos. Escucho su carcajada. Y cuando me deja en el piso, golpeo su pecho.

—Tenemos que hacerlo mucho mejor. —advierto señalándolo. Él muerde mi dedo.— Ay, idiota.

—¿También viste lo que ahora dicen de nosotros?

—Sí, nos quieren juntos... en la vida real.

Ambos nos reímos, él besa mi frente y doy un paso hacia atrás.

Él es lindo, y me ha tratado muy bien, pero no quiero volver a involucrarme con nadie que trabaje conmigo y al final de todo me vea la cara de estúpida y luego me presuma a su novia todos los malditos días.

—Voy a llamar a mamá. —me justifico.

—Ya estoy aquí, ¿Qué pasó?

—Ay, mamá. —sonrío.— ¿Cómo estás?