❝ no vamos a dejar que reemplaces a omma ❞
✶ chan ♡'s minho
✶ family au. mpreg. boys love. cambio de edades. escenario ficticio
✶ minúsculas intencionales.
✶ menciones de otras parejas y/o idols.
✶ 𝙖𝙙𝙖𝙥𝙩𝙖𝙘𝙞ó𝙣 en corrección. todos los crédi...
no me pude contener y pues aquí tiene un nuevo capítulo, disfrútenlo uwu. ♡♡
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
─Señor Bang.─ llamó la enfermera acercándose a ambos.
Ambos se pusieron de pie.
─Felicidades, usted es padre de un niño muy saludable.─ dijo la enfermera. ─¿Quiere pasar a verlo?
─Lléveme con él.─ respondió con nervios y al mismo tiempo gran emoción. Chan volteó con Minho. ─Ven conmigo.
─¿Qué? No, Señor, yo no puedo...
─No, si puede pasar. El niño está muy bien, así que no hay ningún problema.─ respondió la enfermera.
─Ahora no tienes excusa.─ dijo Chan. ─Ven conmigo.
Minho finalmente asintió con emoción. Le gustaban mucho los niños, más cuando eran bebés, le hacían recordar mucho a su bebé y a lo mucho que lo extrañaba.
Después de irse a poner el equipo necesario, la enfermera les indicó el camino y los llevó al lugar donde el bebé aguardaba.
La enfermera sacó con mucho cuidado al pequeño de la incubadora.
Chan estaba muy ansioso por tenerlo entre sus brazos, pero quería que Minho sintiera lo que un día le negaron.
─Cárgalo.─ dijo Chan extendiendo su mano a Minho.
─No... Es su hijo... Yo no puedo...─ dijo con inseguridad sobando sus brazos mientras retrocedía.
─Por favor, hazlo, yo te lo pido.─ dijo Chan acercándose a él.
Minho miró al pequeño y después a Bang.
─¿Está seguro? Yo nunca he cargado un bebé.─ dijo con inseguridad.
─Bueno, entonces lo harás ahora.─ respondió Bang.
Minho asintió con miedo acercándose nuevamente.
La enfermera le indicó como debía de hacerlo y la posición para el menor.
─Es tan... Bonito,─ susurró Lee con una sonrisa y sus ojitos cristalinos mientras lo veía. Volteó con Bang. ─mi hijo tal vez era igual de lindo... ─Y lo sigue siendo seguramente.─ respondió Chan. ─Tiene mucho que heredar.
Las mejillas de Minho se sonrojaron mientras este volvía su mirada al pequeño.
─Su esposo sigue dormido, está débil, pero se pondrá bien.─ dijo la enfermera.
─Muchas gracias, pasaré a verlo antes de irme, tengo que ver a mis hijos y traer algo para mi hijo.─ dijo Chan para después voltear a ver la escena que más lo cautivó. Minho le estaba hablando a su hijo haciendo gestos que lo hacían ver tierno y gracioso, se veía tan feliz.
