Capitulo 1

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El sol de poco a poco empezaba a mostrarse, haciendo que un pélinegro se levantara con algo de molestia de su cama, sip, ese es nuestro protagonista.

Kai se levantaba con algo de molestia de su cama para después acercarse a su armario y sacar la ropa que vestiría aquel día, todo parecía que su rutina seguiría de la misma manera.
Levantarse, cambiarse, desayunar y entrenar.

Eso era lo que hacía normalmente todos los días.

Así que mientras el pélinegro se colocaba una camisa deportiva dirigió su mirada en dirección a su mano derecha, en donde se encontraba una gran quemadura así como varias cicatrices alrededor de esta.
Y mientras posaba su mirada en ella de poco a poco empezó a recordar aquella fatídica noche.

Flash back

Se podía ver a un niño de diez años sentado en la sala de su casa, viendo con mucha emoción la pantalla del televisor pues en esos momentos se estaba transmitiendo una noticia acerca de un rescate a manos de su héroe favorito, así es, hablamos de All Might.

El ver como es que su héroe favorito rescataba a las demás personas teniendo siempre una sonrisa en su rostro, era algo que le alegraba y mucho, pues eso alejaba los sentimientos negativos que sentía al no poseer un quirk.
Sin embargo, en ese momento su madre lo había llamado.

- Kai, ¿Podrías cerrar la trampilla de mi habitación Por favor? - Cuestionó la madre del pélinegro con un tono dulce y tranquilizante en sus palabras.

- Si mamá. - Comentó el pequeño para después levantarse del sillón, colocarse sus tenis e ir a la habitación de su madre.

Una vez estando dentro el pequeño pélinegro empezó a buscar la cadena que cerraba la trampilla, y una vez que la encontró se acercó a ella para después tirar de ella, haciendo que la trampilla se cerrara de poco a poco.

Con algo de lentitud la trampilla se empezaba a cerrarse, no obstante antes de que esta se cerrara por completo, el pelinegro dirigió su mirada a una ventana, donde pudo observar una luz extraña al otro lado de la ciudad, donde una explosión se escuchó segundos después.

- ¿Quieres que te ayude pequeñín? - Cuestionó la madre del pelinegro  mientras entraba a la habitación, y al ver lo mismo que su hijo con velocidad se acercó a la cadena de la trampilla para tratar de cerrarla por completo.

Sin embargo segundos después de aquella explosión una especie de energía brillante y de un color amarillenta había empezado a extenderse hacia toda la ciudad, y en aquellos momentos tanto la madre como el hijo trataban de cerrar la trampilla, pero antes de que pudieran lograr su cometido, lamentablemente a los dos les había caído un rayo.

El impacto mandó a volar al pequeño en contra de unos cuantos archiveros, mientras que en su mano derecha se formaba una gran cicatriz de la cual empezó a salir un poco de humo, y después de haber chocado con el archivero perdió la conciencia, en cambió su madre, tenía amabas manos complematemente quemadas, un leve humo parecía salir de su cuerpo, lamentablemente había fallecido.

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En estos momentos el pequeño pélinegro se encontraba de camino al hospital, pues sus vecinos al escuchar el estruendo fueron a revisar su residencia, y al ver la escena no tardaron en llamar a emergencias.

- ¿Qué diablos le sucedió a este chico? - Cuestionó con gran preocupación el paramédico mientras reaplicaba comprensiones en el pecho del pelinegro.

Un Nuevo Velocista. Where stories live. Discover now