✿⨾ Llamada 54

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Minutos antes...

— ¿Gou-chan?

El rubio parpadeo ante el asombro.

— ¿Qué haces aquí?

— Ehh.. yo..— Empezó a balbucear ante el nerviosismo el de ojos magenta.

¿Qué hace Gou-chan aquí?

— ¿Como supiste que trabajaba aquí Nagisa-kun?

— No lo sabía...

Eso explica el uniforme que usa.

— ¿Entonces?.— Inquirió la pelirroja con los brazos cruzados.

— ¡Vengo a comprar pizza!

— ¿Con qué dinero, si se puede saber?

— Como tu mejor amigo me merezco una muestra gratis~

— No abuses la confianza.

— Entonces con la autoridad que me otorgas como hermano de otra madre, tomaré tu dinero y me comprare una pizza de todos modos~

— ¡Oye! ¡Ya me es suficiente mantener la casa en pie con tu naturaleza destructiva!

Ahogo una exclamación indignado de forma dramática mientras colocaba su mano libre en su pecho.

— ¡Gou-chan me ofendes!

La mirada que le dirigió su amiga lo hizo tragar en seco, podía sentir el regaño de hermana mayor con carácter maternal que se venía para reprochar su alma desdichada.

— ¿Cuando incendiaste la cocina?

No,no,no,no... Bueno si.

— ¡Pero-!

— ¿Los mosquitos por los dulces olvidados?

Son difíciles de encontrar ¡No es con mala intención!

—  Bueno yo...

— ¡Mis preciadas cortinas!

¡Estaba hablando con Rei-chan! Fueron un gran sacrificio.

— ¡Eso fue culpa de Pinkie-chan!

 — ¿Y quien trajo a Pinkie-chan a la casa?

¿Saben que se siente que te vea con esos ojitos tan tiernos? ¡Fue inevitable!

— Fui yo.

— ¡Si! ¡Tú!.— Suspiro cansada.— Nagisa-kun si vamos a vivir juntos deberías de colaborar un poco más o tendré canas antes de envejecer.

No puedo evitar sentirme mal, quiero llorar.

— Lo siento Gou-chan~ ¡Prometo no causarte más problemas!

El rubio con algunas lagrimitas se lanzo a abrazar a la pelirroja mientras chocaba ambas mejillas de forma muy cariñosa, la chica resignada se dejo abrazar con las mejillas sonrojadas.

— Eres malditamente adorable, solo por eso te perdono Nagisa-kun.

— Adorable no, guapo cariño~

Se mantuvieron así por unos segundos más, hasta que el rubio decidió por fin soltarla mientras desviaba la mirada apenado.

— Si no fuera por ti, estuviera viviendo en alguna parte de la calle.— Levanto la mirada con seriedad hacia la chica sin dejar de brotar lagrimas de sus ojos color magenta.— ¡No sé como pagarte por tanto Gou-chan! Agradezco mucho tu ayuda.

La pelirroja le sonrió conmovida.— Nagisa, eres mi mejor amigo y haría cualquier cosa por tu bienestar.

— Siento que soy una carga para ti...

— ¡Pa,pa,pa,pa! ¡No hables estupideces! Mírame.

Las mejillas del rubio fueron tomadas haciendo que levantara la mirada. 

— Yo, Gou Matsuoka, prometo cuidar de ti, y velar constantemente por la felicidad que mereces, evitare a toda costa que regreses a ese horrible lugar y voy a permanecer a tu lado hasta el final de los tiempos.— comento con confianza mientras extendía su meñique, y cuando sus dedos se entrelazaron.— Promesa del meñique, si miento tragaré mil agujas.

El chico sonrió con un brillo especial en sus ojos.

— Yo, Nagisa Hazuki, prometo nunca fallarle a Gou Matsuoka y ser para ella lo que ella es para mi. Promesa del meñique, si miento tragaré mil agujas.

— ¡Listo, ya no puedes retractarte! Pinky promise.

Pinky promise Gou-chan~

— Ahora que paso el momento cursi, ¿Y esa rosa?

— ¿La rosa de guadalupe? ¿¡Dónde!?

La chica señalo el pequeño ramo que tenia en una mano el rubio, eran tres rosas de color turquesa.

Sencillo, pero un detalle es un detalle.

— Ah.

— ¿Para quienes son?

— Eh.

— Acaso...

— ¡Si! ¡Estoy enamorado Gou-chan~!

Quedo muda ante la confesión contraria, y no pudo evitar sonreír con suma burla.

— ¿Quién es el desafortunado?

— ¡Oye-!

— Es broma~

— Como Gou-chan trabaja aquí ¡Debes de conocer a mi Rei-chan!

— ¿Rei-chan?... ¿Te refieres a Rei Ryugazaki?

— ¡Por supuesto! ¿Dónde esta mi amorcito?

Con un dedo señalo hacia la sala de empleados y sin preguntar, el rubio se dirigió hacia el lugar, no encontrando a nadie allí.

— ¡Gou-chaaaaaaaaaaaaaan~! No hay nadie.— Hizo un puchero.

— Debió haberse ido, tonto.

— ¡Habíamos quedado! Tendré que buscarlo.

— Te deseo suerte tigre~

— No la necesito, me basta con mi encanto~

Nuevamente la campanita sonó, anunciando la salida del rubio.

Nuevamente la campanita sonó, anunciando la salida del rubio

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Floreció un capitulo largo y es la primera narración larga en la historia, debo de admitir que no lo tenía planeado ¡Quede satisfecha!

Agradezco su estadía aquí y les deseo un lindo día :DD

Amor de Pizza / ReigisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora