ㅤ▸ O13

3.5K 595 186
                                    

Celos

—¡Oh, madre! Sunghoon ya se tiene que ir a casa, ¿verdad que sí?

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¡Oh, madre! Sunghoon ya se tiene que ir a casa, ¿verdad que sí?

Sunghoon dirige su mirada hacia el pelinegro y asiente con nerviosismo, no sabe porque razón pero también se encuentra muy avergonzado de la situación en la que se han metido.

—Eh, sí, disculpen. —expresó observando la hora en su lujoso reloj, la madre de Sunoo coloca una cara triste al saber que va a marcharse tan rápido. —Tengo un par de cosas urgentes que hacer de inmediato o no terminaré.

—No hay problema, muchacho. —contestó Yongho sonriéndole cálidamente antes de brindarle un abrazo, el pelinegro adolescente abre sus ojos con impresión y controla las pequeñas risitas que quieren salir de sus labios al ver los gestos de Sunghoon.

—Papá, ya déjalo.

El azabache le agradece con la mirada una vez que el señor Kim lo suelta, se acerca por primera vez en la historia tímidamente a Sunoo. No tiene idea de cómo despedirse de él si sus padres están presentes y atentos a cualquier movimiento suyo.

—Te veo luego, niño. —le dice revolviendo sus cabellos pelinegro hasta dejarlo totalmente despeinado, se ríe tan bonito que Sunoo siente que quiere oírlo un poco más, sólo un poco. —Por cierto, le diré a mi hermano que tiraste su horrible peluche. Es que no le oculto mentiras, sabes.

El chiquillo de ojos azules alcanza oír lo último muy apenas, sus padres se encuentran desconcertados al no escuchar nada.

—Adiós, Sunghoon. —se despide agitando su mano levemente y el azabache repite la acción sonriéndole enormemente, incluso sus propios padres se despiden eufóricamente de él ocasionando que Sunghoon se meta aterrorizado a su automóvil. —Haha el peluche, espera yo no tiré nada... ¡Sunghoon!

Cuando intenta gritarle groserías, el automóvil arranca dejándolo con la palabra, ¿De verdad este hombre era el CEO estricto y educado que tenía a tantas personas suspirando por él? Definitivamente debieron equivocarse porque era todo lo contrario.

Cuando intenta gritarle groserías, el automóvil arranca dejándolo con la palabra, ¿De verdad este hombre era el CEO estricto y educado que tenía a tantas personas suspirando por él? Definitivamente debieron equivocarse porque era todo lo contrario

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

AL SIGUIENTE DIA.

—¿A qué hora va a llegar?

Sunghoon se toca el puente de la nariz con frustración, se echa para atrás sus rizos oscuros.

𝐓𝐑𝐈𝐋𝐋𝐈𝐙𝐎𝐒 › sungsunWhere stories live. Discover now