Estaremos Juntos (zeldris y tu)

Juntos la protegeremos

Narra Naomi

Ya han pasado unos cuantos anos años desde que salí del sello, he tenido que ver a 50 o mas Elizabeth distintas morir sin que Meliodas o yo podamos hacer algo, mientras que el ha visto 105 Elizabeth, se que el no aguantara mucho mas y eso me preocupa, actualmente estamos en un reino que se llama Danafold, aquí Meliodas y yo nos convertimos en caballeros sacro, claro que la nueva reencarnación de mi amiga, ahora su nombre era Liz, esta con ostros después de todo somos un equipo, pero no se como de estar alegres y jugando pasamos a un batalla a muerte.

Hace poco unos demonios empezaron a aparecer por todo Danafold, intente proteger a tantas personas como pude, pero cada vez había mas cadáveres, en algún punto en toda esta batalla perdí a Liz, por lo que empecé a correr intentando buscar a Elizabeth y Meliodas, pero había llegado demasiado tarde.

Meliodas: ahhhh!!!! -oí un grito desgarrador, sabia quien era así que corrí lo mas rápido que pude hacia el-

Cuando llegue pude ver que Liz estaba muerta, su pecho tenia un gran agujero y por el aun brotaba su sangre roja y caliente, y Meliodas estaba ahí mirándola, no lo pensé dos veces y fui a abrazarlo, su cuerpo estaba rígido y la lluvia que había empezado a caer comenzó a mojar nuestras roas.

Meliodas: por que Naomi, dime por que nunca puedo ayudarla? -me hablo con furia mientras sentía como se tensaba cada vez mas, note que su poder mágico se estaba elevando pero aun así no me aleje de el-

Naomi: lo siento Mel, es mi culpa no la pude proteger, perdóname -empecé a llorar, pues era verdad lo que dije, fui yo quien la perdió y fui yo quien no la supo cuidar-

En ese momento vi como una luz oscura salía de alrededor de Meliodas, sabia que era su poder demoniaco pero no me importo y lo seguí abrazando, luego de eso sentí como estaba perdiendo la conciencia, era bastante lógico el porque, el poder de mi amigo estaba logrando que perdiera fuerza y eso logro que yo cayera al suelo, lo ultimo que vi fue una gran nube de color negro que me cubría a mi y a Meliodas lentamente.

Cuando volví a despertar Meliodas estaba viniendo hacia mi con una bebe en brazos, me levante como pude y comencé a caminar de manera lenta, el al verme se acerco rápidamente y con su mano libre me ayudo a sostener mientras me mostraba a la pequeña criatura que traía en sus brazos.

Naomi: ella es -no pude terminar mi frase, pues la bebe que estaba viendo era la nueva reencarnación de Elizabeth, nunca había visto que esto pasara tan rápido, siempre pasaban unos meses al menos hasta la siguiente reencarnación-

Meliodas: es Elizabeth, esta ves la cuidaremos bien -me hablo con dulzura mientras me pasaba por un breve momento a la pequeña-

Naomi: pequeña Lisi, te cuidaremos con nuestras propias vidas no importa que -le hable mientras ella aun seguía dormida, luego se la devolví a su protector y ambos nos miramos decididos a cuidarla-

Empezamos a caminar con la intención de salir de aquel hoyo que alguna vez fue un reino, cuando salimos del agujero, vimos a unos caballeros sacros, eran de otro reino pero aun así no eran confiables para nosotros, ellos intentaron quitaros a Elí, por lo que me puse delante de Meliodas y los mire decidida a atacarlos si daban solo un paso mas.

Meliodas: no te atrevas a  tocar a mi mujer -miro con enojo a aquel caballero que se había acercado a nosotros-

Naomi: si das un paso mas date por muerto -le dije mostrando mi arma-

??:no le haremos daño 

En ese momento desperté, había tenido de nuevo el sueño en donde habíamos salido de Danafold, era mas que un sueño una pesadilla, pues recordaba la sangre y los fritos de la gente mientras eran asesinados, era como volver a ver en mi mente lo que ocasiono la guerra santa.