¿Las personas pueden ser capaces de cambiar su destino?
Después de que el omega Jeon Jungkook perdiera a su alfa destinado, su vida se complicó demasiado cuando conoció a un alfa que le hizo la vida miserable.
Estando solo y embarazado, decidió ace...
Te odio, deja de hacerme actuar como un tonto lobo estúpido
Huele a una omega¿Nuestro alfa ya no nos quiere?¿Esta con otra? ¿Que tiene esa que no tengamos?
Él ni siquiera es nuestro alfa, deja de hacerme sentir celos.
Deja que hable con él
Si así me dejaras en paz, esta bien
Desde que Tae Joo se acercó a mí supe que una omega había impregnado su aroma en él y no le hubiese dado importancia de no ser por mi lobo, que se sentía mal por pensar que había estado con alguien haciendo quien sabe que.
Últimamente me había concentrado demasiado en su aroma, solo porque mi omega seguía repitiendo una y otra vez cada vez que lo veía, que era su alfa. Trataba de recordar el aroma de Taehyung, pero me era muy difícil, lo único que recordaba perfectamente era que solo con él podía oler 3 aromas diferentes, ahora lo podía hacer con Tae Joo también y eso me había tenido muy confundido ¿Me habia equivocado con Taehyung? ¿Acaso él no era mi destinado y lo era Tae Joo?
Nada tenía sentido y por eso había decidido tratar de ignorar ese hecho.
Era mejor así, era mejor que me concentrara en lo que realmente importaba; en mi hija, mi universidad y mi trabajo de medio tiempo, no en un chico que apenas conocía.
Yo era de los pocos omegas que seguían viviendo a pesar de la muerte de su destinado y de un lazo roto, así que debía aprovechar el resto que me quedaba de vida para hacer lo que quería junto a mi pequeña Lisa, antes de morir y poder reencontrarme con Taehyung en mi próxima vida.
Solo por esta vez dejaría que mi omega me controlara, sería la última vez que lo haría, porque después yo decidiría que era mejor para mí. Si estaba solo o me enamoraba de alguien seria por mí y no por lo que mi omega me dijera.
Mis ojos comenzaron a destellar en azul apenas salí del auto de Tae Joo; supe de inmediato cuando sentí que la lluvia dejaba de mojarme por unos instantes, que Tae me había seguido y me había cubierto con su abrigo como el momento en que me recogió de la universidad. Volteé para encararlo a pedido de mi omega y solucionar el «Problema» y pude ver como sus ojos destellaban en un amarillo brillante, su alfa también lo estaba controlando siendo ahora nuestras partes lobunas las que hablaban entre sí. Decidí ignorar lo que sucediera entre ambos y dejar que las cosas fluyeran según mi lobo deseara.
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—¿Estás molesto?— habló el alfa mirando directamente a los ojos a mi omega.
—¿Tú qué crees?— cuestionó mi omega cruzándose de brazos con el ceño fruncido.
—Pero no es lo que piensas— dijo de inmediato tratando de tomar la mano de mi omega quien al ver su intención se alejo rápidamente manteniendo una distancia prudente.
