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OO5: CHAPTER FIVE ¿que estará haciendo?
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luego de haber escapado de aquel atractivo ser, Lieberher caminaba por los pasillos siendo seguida por su amigo Byers, quien aún seguía confundido, no se arrepentía de haber dicho aquella mentira pero ahora se sentía algo incomoda.
se dirigía a la biblioteca, era su principal destino, el porque había sacado esos libros de su casillero, para devolverlos.
la voz de su amigo a sus espaldas ya le estaba inpacientando, a demás de que hablaba con un tono mucho más alto que lo habitual, un poco más y ya estaría gritando, muy seguramente las personas que veían a los raros de la escuela escucharán perfectamente todo lo que había pasado mediante Byers, y el hecho de que todos se enteren de aquello no era del todo agradable, sabía que si se enteraran seguramente pasarían de la situación, pero odiaba cuando la gente que no conocía supiera cosas de ella, sus cosas son sus cosas, los demás no tenían porque saber.
—dayra, ¿no me responderas? ¿Por qué le dijiste eso al chico nuevo?— ya dicho antes, el tono de voz de Jonathan era bastante alto, la castaña suspiró y se detuvo dándose media vuelta para ver de frente a su amigo
—no lo sé ¿Está bien?— habla sin más la castaña algo harta de oírlo preguntar lo mismo a cada rato —ese tipo de chicos solo quiere una cosa, y yo no quiero ser parte de eso— habla decidida y segura de sus palabras, Jonathan suelta una risa acompañada de un bufe
—que gracioso, te gusta Steve Harrington— al oír aquello, Dayra se estremeció, estaba a punto de girarse cuando escuchó la ironía de su amigo, enfadada volvió a mirarlo de frente
—y a ti Nancy Wheeler— le dijo sin más borrando aquella divertida sonrisa de su rostro por una mueca aprobando que tenía razón —no somos tan diferentes, Jonathan, no puedes juzgarme— niega la castaña
—lo sé... Lo siento— Dayra podía llegar a ser muy terca a veces en cuanto a la razón, pero si algo sabía Jonathan de ella, es que cuando tenía razón, tenía razón y nadie podía negarlo, en éste caso, tenía razón y no podía discutirlo
