LAURA ━Boys Over Flowers━ Go Jun Pyo [en Edición]

Capitulo 25

┍━━━━━━━★━━━━━━━┑

┕━━━━━━━★━━━━━━━┙

—¿Cómo que estamos en bancarrota?

—es por culpa de tu padre.

Parando de caminar en circulos, Laura negó con la cabeza sin poder creer lo que pasaba. Todo había estado tan bien desde que entre comillas acepto salir con Jun Pyo y ahora todo se había ido por el tacho. Gustavo había despilfarrado todo su dinero en una mujerzuela que le terminó robando, y sino fuera por Isabella no sabrían nada.

—es un inepto, ¿Cómo pudo dejar que le vieran la cara de estúpido? —la latina menor sonrío irónicamente— ¿pero como no? si eso ya lo tenía.

—¡Laura!

—es verdad, por su culpa somos pobres mamá.... —la oji-marrón tragó saliva mirando hacia el suelo— es cuestión de tiempo para que nos quiten esta casa y la de siempre...

Laura no quería perder la casa que tenia en su país. Donde había crecido junto a sus hermanos y donde a pesar de que hubo malos momentos, aún tenía algunos rescatables en ella.

Soltando un suspiró Elizabeth chasqueo sus dedos llamando a una de las sirvientas, que se apresuro a su lado para entregarle unos papeles que estaban dentro de un portafolio elegante color azul oscuro. Una vez que tuvo el documento en sus manos, la latina mayor mando a la sirvienta por dos tés con un postre mientras abría el archivo pensativa.

—no somos pobres, pero tendremos que acomodarnos. —explico Elizabeth pasando una pagina, seguidamente se mordió el labio escuchando como su hija menor le decía "¿como es eso posible?"— aún trabajó para Gucci ¿recuerdas?

—¿seguirás ahí? —le cuestionó Laura negando con la cabeza triste— pero no te gusta mamá, no te dejan expresar tus diseños a tu gusto.

—pero es nuestro único fondo permanente hasta ahora. —indicó la latina mayor respirando hondo, para luego soltar el aire pesadamente— Tengo que educarte, aún ni has cursado la universidad.

—pero tu sueño.... —murmuro Laura triste porque su madre ya no cumpliría su sueño, que era tener su propia linea de ropa.

—tranquila cielo, eso aún puede cumplirse. Tal vez no ahora, pero.... —Elizabeth sonrío levemente— pronto, nunca hay que perder la esperanza.

—te adoro ma.

Corriendo hacia su madre, Laura la abrazó haciendo que ambas queden apoyadas contra el respaldo del elegante sillón color hueso. En respuesta Elizabeth le devolvió el abrazó dándole un beso en la frente diciéndole que la amaba mucho, dicho gesto fue rápidamente correspondido por uno igual dicho por la pequeña latina.