𝔼𝕤𝕥𝕦𝕡𝕚𝕕𝕒𝕞𝕖𝕟𝕥𝕖 𝕄𝕚𝕝𝕝𝕠𝕟𝕒𝕣𝕚𝕠 || R e d d i e

17

Los días habían transcurrido, habían pasado cuatro días después de la discusión.
Richard fingía que todo estaba bien, por el día era normal, por las noches gritaba y lloraba por que en realidad nada estaba bien.
Eddie estaba ahí animándole y consolándolo.

Maggie y Went no se dirigían la palabra, dormían en camas separadas, de hecho cada quién ahora tenía su habitación.

En esa casa nadie hablaba, nadie se dirigía la palabra, sólo Eddie y Richie y eso era todo lo que necesitaban.
Claro que las cosas habían cambiado, Eddie seguía trabajando, ya que tenía un contrato, que firmaba y aseguraba que Eddie Kaspbrak debía, bajo cualquier circunstancia, trabajar para la familia Tozier hasta que Maggie encontrase a una nueva servidumbre.

Algo se aproximaba.
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Viernes 7 de Marzo
7:29AM

Richard despertó totalmente solo en su cama, Eddie no estaba.
Se talló la cara para quitar su sueño y vió como el pequeño Eddie entraba por la puerta con una bandeja la cuál traía un bonito desayuno.

Richie sonrió al verlo.

-Feliz cumpleaños mi amor- habló Eddie y Richie hizo una mueca de disgusto, no por el desayuno de Eddie, sino por que ese día era su cumpleaños. El pequeño Kaspbrak notó la cara de disgusto de su novio- ¿no te gustó?- preguntó con tristeza

-no Eddie, no pienses eso, créeme me ha encantado lo que hiciste por mí, realmente se ve delicioso, es solo que...Dios... nunca me ha gustado esta fecha, no me gusta el día de mi cumpleaños, siempre es lo mismo, un banquete y fiesta sin fin, todo en calma, la familia se reúne y así pasa el día, nunca hay diversión, y eso es realmente aburrido para mí, por eso detesto este día- explicó Tozier colocándose sus lentes.

-oye, no siempre es malo, es el primer cumpleaños que pasamos juntos- dijo Edward y besó a su novio con amor.- prepárate porque hoy será un gran día, es tu día- Eddie besó su mejilla.

{...}

5:38PM

Ahí estaban todos en casa de los abuelos.
Presentes estaban los abuelos de Richie, junto con sus primos y todos sus tíos.
Eddie por su puesto estaba trabajando sirviendo la comida y las bebidas para la familia.
Richie sólo tenía la cara seria, todos comían en silencio aquel gran banquete que sus padres anualmente organizaban.
Literalmente no había nada de música, nadie hablaba, todo era como Richie lo había descrito: aburrido.

Eddie sin que nadie viera, llamó la atención de su novio, en señas le comunicó que lo siguiera.

-Disculpen, iré al baño- anunció el de lentes y se levantó de su asiento.

Tan pronto como pudo, entró al cuarto de baño encontrándose a un Edward sentado en el lavabo con las piernas abiertas y una mirada traviesa.

Richard se acercó y se colocó entre las piernas de Eddie, las piernas de Edward rodeaban la cintura de Richie ya que estaba sentado en el lavabo.

-siento mucho que no estés disfrutando tu cumpleaños cariño- habló el asmático con una sonrisa algo triste

-tú estás mejorando este día- respondió Richard acariciando su mejilla- de verdad es muy aburrido estar aquí

-¿Quieres ir a una verdadera fiesta?- preguntó el castaño con una mirada divertida

-sí, si es contigo- respondió el azabache tomando las manos de su amado novio.