Adiós.

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Severus comprendía la necesidad y apego enfermizo que su madre tiene por aquel hombre que es su padre. El intento de querer ayudarla ,y hacerla entrar en razón lo canso. Ella no podía dejarlo por qué había algo que lo impedía,el amor que siente por él . Tobías a los ojos de severus era un muggle que no valía la pena,un padre ausente ,y a alguien que quiere lejos.
El compartir manto con Blanca y verla descansar cómodamente le dio celos, ella es tan diferente a él, su madre era diferente a la suya. En ese momento severus se dio cuenta de lo tan injusto es la vida,si no luchas por algo nada cambiaría. Ahora el fue echado por su padre con apenas ocho años, tiene su orgullo y no piensa pedir disculpas a la persona que no lo merece.

No pudo conciliar el sueño, inquieto miro al oscuro alrededor. El cuarto es pequeño pero acogedor la ventana en forma de un huevo permitía que entre un poco de luz desde afuera, toco su cabello y lo sintió suave y mientras lo movía un olor a mente entraba a sus fosas nasales. Antes de entrar a la cama, muriel baño a severus y a blanca por separado , por primera vez severus probo la calidez de una madre muggle. Miro incómodo a su amiga y con un sentimiento que un niño como él no pudo descifrar movió su cuerpo para darle la espaldas, no quería seguir viéndola.

Al día siguiente severus se despertó primero y en silencio bajo a ver a Muriel, el olor a pan horneado había sucumbido toda la casa, al recordar lo que le dijo blanca ayer volvió a subir, se cepillo los dientes y se aseo el rostro y bajo a saludar.

—Buenos días — Respondió muriel.— ¿Descansaste bien?, Siéntate en la silla del comedor, ahora te serviré tu desayuno.

— Ella todavía ha despertado— Dijo mirando las escaleras.

Muriel sonrió— Aveces suele tener el sueño pesado—

Le sirvió avena y pan con mermelada de naranja. El niño desayuno en silencio.
Muriel mientras hacia sus cosas miraba de soslayo a severus, suspiro pensativa. La petición que blanca le había pedido ayer era demasiado para muriel, y ahora con solo ver a aquel cuerpecito débil ya no era difícil decidir en lo que era correcto o no. Dejo el trapo a un lado y se sentó alado del niño. Suspiró y llamo la atención de Severus.

— Severus ,querido. Yo estoy enterada de tu situación... Y quiero pedir tu permiso para que te quedes con nosotros. Claro, primero tendría que hablar con tus padres y hacer unos cuantos papeles, pero la cuestión es que le agradas mucho a mi hija y no miento al decirte que también me agradas a mí. No lo sientas como una presión, sea cual sea tu decisión yo lo entenderé— Con una mirada comprensiva hablo con  sinceridad — Cuando tenía tu edad, yo no tuve el apoyo de nadie. Y no quiero que alguien más enfrente ese dolor ,por eso me encantaría que nos aceptes como a tu nueva familia.

Quedo impactado ante esta revelación, severus no esperaro las palabras de muriel. Se quedo mudo por unos segundos, trago el pan sin creer. Busco la mirada de la mujer, si había un indicio de que bromeaba. Parpadeó varias veces.
Salir de casa era lo que más quería, contaba los días para cumplir Once años y recibir la carta de Hogwarts. Sentía que Hogwarts era su única salida pero nunca esperó que alguien le diera la mano ,mucho menos un muggle. Ahora que tiene la oportunidad de irse de casa, se sintió tristeza. Eileen era su madre y no quería abandonarla.

Después de desayunar sin darle una respuesta a muriel, le dijo que hablaría con su mamá primero. Salió de aquella casa decidido a hablar con su madre o tal vez a despedirse si la situación lo pide.

Lo que nunca espero es ver a su madre en la puerta esperándolo con una bolsa en su mano. Eileen al verlo llegar corrió a abrazar a su hijo, se disculpo en lágrimas.

— Mamá te ha echo pasar frío afuera, mamá lo siente mucho. Severus perdona a tu madre— Dijo con la voz quebrada.

Severus asintió con la cabeza. Por última vez,perdono a su madre. Eileen lo hizo entrar a casa ,el lugar estaba irreconocible. Lo que antes era lúgubre y abandonado,se cambió a colores vivos. El niño fue sorprendido por segunda vez, miro a su madre pidiendo alguna explicación. A lo que ella sonrió y saco de su bolsillo una varita, la que siempre decía que lo había roto y tirado a la basura estaba intacto en sus manos.

Eileen sintió miedo al ver los sentimientos de Severus, cuando vió gritar a Tobías comprendió lo que su hijo quería y ella sintió miedo. Miedo a ser abandonado por él. Al verlo querer irse lejos, su corazón se alarmó. Eileen ya estaba influenciada por Tobías, su autoestima se vio afectado en muchas maneras y se había acostumbrado a ser maltratada, y esa misma emoción de dependencia hizo dejar a Tobías y amenazarlo para que se largará esa noche. Ella se aferro a una razón, no despedirse de su hijo.

—Desde ahora seremos tu y yo hijo—

Desde ese día no se volvió a ver a Tobías, y eileen se presento como la madre de severus en casa de muriel. Muriel felicitó por la decisión que eileen tomo, le dijo que no estaba sola. Muriel paso por el mismo infierno ,vio a sus padres convertir su infancia en un infierno.

Severus completo su infancia alado de lily y blanca. Pero algo inesperado sucedió cuando los tres cumplieron 10 años.

Una oferta de trabajo le surgió a muriel ,y tenía que mudarse a londres. Dejo su casa de la hilandera, y llevo a su hija a despedirse de lily y severus. Ambos niños no se esperaban la noticia por lo que con tristeza se despidieron y prometieron encontrarse en Hogwarts.

El tomar caminos separados causa un efecto en las vidas de cada uno.

Severus se volvió más cercano a lily, era la amiga que le quedaba.


REENCARNE COMO UNA BLACKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora