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Vivir bajo presión,bajo la mirada de todos,con miedo a hacer algo mal o hacer algo bien pero que al resto no le guste como él esperaba. Así vivía Peter. Trabajando de lo que más ama y le gusta,pero con miedo. Obligado por sus padres que lo obligan a que haga lo que cree que es mejor para los fans. Pero qué sentido tiene hacer algo que no querés y no estás disfrutando? Quizás el resto lo disfruta pero y él? Él no. Claro que no. Su mirada sigue clavada en el techo mientras piensa en todo lo que acaban de decirle sus padres

"La gente espera que lo hagas hijo,se los debes y a nosotros también"

"Quizás sea mejor darles una segunda parte porque el final no se entendió,es necesario"

"Tenés que escribir tu próxima película pronto,si tardas la gente va a perder interés en vos"

"Es muy aburrida,esa no va a ser buena"

Palabras hartantes para un artista que la base de todo para realizar su arte es dejarse llevar haciendo lo que siente,sin presión y a su tiempo. Pero él no podía hacer las cosas a su manera o quizás si podía pero no quería por miedo. La única decisión que tomó sin consultar fue la que acababa de tomar ahora,solo agarró lo que necesitaba :
Una moto,su chaqueta de cuero,su musculosa blanca,su escape,su llegada a Miami.

Las tardes en Miami eran mágicas,la playa,el atardecer y la tranquilidad. Este era el lugar que intentó buscar por mucho tiempo y ahora al fin llegó. No sabía bien que era lo que buscaba,quizás tranquilidad,soledad o respuestas. Pero...¿Respuestas de qué? Ni él sabía. Solo hay un momento en la vida donde ya sos adulto,hiciste lo que querías y ahora ya no sabes que hacer porque a sus veinticinco años ya hizo todo lo que se propuso en la vida, actuó, dirigió y escribió películas. Después de cinco años sin parar decidió tomarse un descanso de ese mundo,de los fans,de la prensa y de sus padres que lo único que querían era sacarle provecho a su éxito intentando manejar su vida,quizás también por eso escapó a un lugar tranquilo lejos de todos ellos. Y no sabía cuánto tiempo iba a quedarse pero deseaba que sea lo suficiente para tomar fuerzas y seguir adelante. Su hambre se hizo presente después de varias horas de viaje y por eso decidió empezar a buscar un lugar para comer. Le llamó la atención un lugar que parecía agradable, Entró al lugar lleno de mesas un poco vacías,había gente leyendo libros en esas mesas negras y sillones rojos,había también gente en pareja o gente sola que quería lo mismo que él: Escapar. Se sentó en uno de esos sillones y una chica de pelo rubio y corto se le acercó

-Hola -lo saludó y agarró su libreta para anotar lo que quiera pedir- que te sirvo?

-Solo una chocolatada y medialunas -respondio Peter-

-Genial,mi compañera va a traerte tu pedido -anotó y se fue-

Ese lugar seguramente tenía la mejor vista hasta ahora,en cualquier lado que te sientes podía verse la playa. la chica que atendió a Peter se fue y vino una morocha. Con el pelo largo y ondulado que tenía atado mitad de pelo con un moño rosa que le hacia juego con el uniforme también rosa,tenía zapatillas finitas y bajas,era muy chiquita de altura. Ella traía una bandeja con dos medialunas y una chocolatada

-Hola -sonrio ella y dejó la chocolatada con las medialunas en la mesa- Tu pedido

-Gracias

-A vos -se fue a seguir trabajando-

La gente estaba empezando a irse y ella juntaba los restos que dejaban los clientes junto con propina. Ahora solo quedaban dos personas: Un señor mayor y Peter. Escuchó a la dueña que le pidió que cerrará cuando todos se vayan y ella asintió,se fue el hombre mayor dejando propina...ella agarró la propina sonriendo y se llevó las cosas sucias.

Señorita Donde viven las historias. Descúbrelo ahora