LAS DOS CARAS DE UN MISMO DESTINO (Pausada)

CAPITULO 5 UNA PROPOSICION

Orión solo compartía con su madre el color de la piel, pero a parte de eso era todo un MALFOY....los ojos grises, el pelo rubio igual que Theo, una copia genética del otro. Se notaba a leguas que aquel niño era hijo de Theo.

El pequeño rubio miraba a Draco con adoración, pero le temblaba el labio inferior, como si intuyera que pasaba  algo.

Tal vez se preguntaba porque su padre no parecía contento al verlo.

Draco tuvo que contener el deseo de marcharse, él no entendía a los niños y si era sincero del todo, no le interesaban en absoluto. Así que mirando al niño le dijo - Yo no
soy tu padre Orión, soy tu tío Draco, hermano de tu padre nos  paremos mucho, eso es todo
¿Lo entiendes?

Una lágrima rodó por la mejilla del pequeño rubio.

La actitud del niño hizo mella en el frío corazón de Draco, quien  miro a Hermione sin saber que hacer, ella le devolvió una mirada cargada de dolor.

Desde el día en que se conocieron, el rubio se había preguntado a que sabrían esos generosos labios, ella no lo había descubierto....algo que lamentaría siempre.

-Ven aquí Orión - llamó su madre. El niño se acercó y Hermione lo apretó contra su pecho mirando a Draco por encima de su cabeza.
¿Aún no me has dicho que haces aquí Draco? - preguntó con tono glacial.

Draco  dejó escapar un suspiro...
¿Por dónde podría empezar? - se preguntó para si mismo. Había ensayado el discurso en el coche,mientras iba hacia allí, y aunque esas palabras le parecían arrogantes y altivas no se le ocurría nada mejor -tengo una obligación hacia mi hermano, Theo hubiera querido que su hijo tuviera todas las ventajas de su posición y apellido, un hogar  del cual sentirse orgulloso, una buena educación, oportunidades de vida todo lo que nosotros podemos darle.

-Yo puedo darle cariño que es lo más importante - refutó Hermione - y cuando mi negocio empiece a prosperar también pondré ofrecerle todas esas ventajas - si crees que voy a aceptar tu dinero, estás muy equivocado.

-No hablo de número Hermione - espetó Draco fastidiado y al mirar a los ojos de Hermione vio un brillo de pánico... Ella pensaba que quería quitarle el niño.

Al notar la angustia de su madre Orión hizo un puchero.

-¡Escúchame! - exclamó Draco apresurado - solo he venido aquí para invitarlos a vivir en la Mansión - hay mucho espacio en la casa y tendrás la independencia que necesitas - en cuanto a Orión...

-Espera un momento - lo interrumpió ella .

-No he terminado - espetó Draco - escucha lo que tengo que decir y después, me dices lo que piensas.

Suspirando un poco, Hermione apartó al niño para mirarlo a los ojos - cariño vuelve a tu habitación a jugar y si  te portas bien haremos palomitas y veremos una película juntos.

Cuando Orión salió del salón, Hermione se volvió hacia Draco
¿Cómo se te a ocurrido esa idea? -
tu madre apenas me dirigió la palabra cuando Theo vivía - tenerme en su casa ahora, a pesar de Orión, sería un desastre para todos.

Draco negó  con la cabeza.

- Hace dos años y tras la muerte de mi padre, mi madre se mudó a un Chalet para personas retiradas. y dijo que nunca volverá a la Mansión ya que le traía demasiados tristes recuerdos.

- ¿Entonces vives ahí solo? - cuestionó Hermione incrédula y confundida.