CALVARIO

246 17 47
                                    

Ese día era completamente nuevo para mí ahí estábamos esperando a testificar, mientras nuestro abogador Pentious Snake, reconocido como un buen abogado en aquel lugar daba vueltas y practicaba el que sería su "sermón crucial"

-Miren jóvenes, el problema en este caso es que estamos contra el mismísimo alcalde en persona y por más que nuestras pruebas sean convincentes tiene más perdida que ganancia-

Eso lo sabíamos muy bien pero realmente estábamos allí esperando testificar por aparte, para mi desgracia nuestro juicio siempre era pospuesto por el mismísimo Lucifer al parecer buscaba una manera de que me cansara de la pelea continua y me resignara, pero eso no pasaría jamás, pase a testificar como las cosas habían pasado en aquel horrible lugar.

-Entonces usted asegura que no entro en aquel lugar por voluntad propia señor, ¿saber que la acusación que usted realiza es fuerte y que dé en caso que se demuestre lo contrario podría usted ir a la cárcel? -

Deseaba que hubiesen permitido a vox entrar conmigo, ahí solo buscaban que yo dijera que todo era mentira, pero no lo fue todo fue horriblemente real.

-Sí, había sido secuestrado e ingrese a ese lugar solo porque me arrastraron hasta allí tengo las pruebas para el caso que el sr Valentino ha cooperado enteramente contra mi voluntad a favor del señor Lucifer Morningstar-

Según lo dicho por Pentious había una prueba que nos dejaría un tanto en duda ya que al parecer Vox aparecía como asociado legal de Valentino por lo que el debería demostrar que estaba en contra de aquello, luego de ello decidimos tomar un café juntos, él tomó mi mano en sus ojos veía el arrepentimiento.

-Quiero que sepas que lo que hizo Valentino fue a mis espaldas, yo jamás hubiere querido algo como eso, si estuve muy interesando en ti, tu afecto y tu hermoso cuerpo, pero jamás me atrevería a forzar tu amor-

Sí, me sentía en duda eso era más que obvio, pero no quería decirlo y mucho menos aceptarlo, pero debía saber que existía el beneficio de la duda.

-No te preocupes, sé que no fuiste tú, no sabías lo que me había sucedido si no hasta que Husk abrió la bocota, asi que no te preocupes-

Lo vi suspirar y tensarse más.

-Me temo que necesitaremos la ayuda del peludo como testigo y también la de su nuevo novio. -

Los suponía muy en el fondo, pero bueno sería algo que hacer después de tanto tiempo y esperando que se hubiere olvidado por completo de nuestra relación.

-Intentaré de visitarlo, espero nos ayude-

En ese momento por extraño que me pareciera, Vox me abrazó con fuerza y solo me dijo.

-No, yo hablaré con él, no quiero que peleen ni nada por el estilo, intentaré de contactar a Angel para que tú te encargues de hablar con él, con una muy buena persuasión aceptará ayudarnos-

No dije absolutamente nada ni quise hacerlo, en ese momento estaba agusto entre sus brazos, me sentía muy seguro como si hubiere un seguro de que en sus brazos no corría peligro.

-Por su bien señor Vox, espero sus testigos y sus pruebas sean suficientemente válidas-

Dijo aquel horrible tipo haciéndome crispar de nervios, lo observé de reojo mientras Vox me daba suaves golpecitos con su palma sobre mi espalda.

-Las tendremos sr Morningstar, le recomendaría que cuide su trasero, me han contado que en la cárcel hombres como usted terminan siendo la mujerzuela de los reos-

Dijo con ese tono de burla que tanto lo caracterizaba, lo escuché acercarse y decir.

-Ya veremos Vox porque cuando este juicio termine terminarás en la cárcel mientras ese idiota que esta entre tus brazos terminará en una de mis tantas casas como una más de mis perras-

Me separé de Vox levemente y lo miré desafiante.

-Si eso sucede me asegurare de quitarme la vida, Lucifer prefiero mil veces que me coman los gusanos antes de terminar en esas sucias manos. -

Dije tomando la mano de Vox y retirándonos debíamos movernos rápido antes de que ese imbécil comenzara con sus ataques.

-Vaya que tienes prisa querido-

Me dijo Vox, me detuve unos segundos y suspiré, a veces me enfadaba que Vox no viera el nivel real de una situación.

-Vox ¿comprendes que tenemos pocas probabilidades de ganar el caso? Si es asi sabes que tengo que moverme rápido antes que ese idiota compre o amenace a alguno de los testigos, porque me siento desesperado por no terminar en las manos de ese lunático y tampoco quiero que él me aleje de ti, no ahora que mi vida parece tomar un rumbo contigo, me rehusó a perder mi alegría de esta manera. -

Sentí nuevamente como rodeaba con sus brazos, no pude evitarlo unas cuantas lagrimas salieron de mi rostro.

-Lo sé, sé que tenemos que movernos rápido Al, yo tampoco quiero que nos separen, no ahora que he logrado después de varios intentos y rechazos que me aceptaras una cita o como pareja, no sabes cuánto había fantaseado con estar de esta manera contigo, o incluso el hacerte mío, envidiaba al peludo que solo él podía ver tus reacciones al hacer el amor, ahora que las he visto quiero atesorarlas solo para mí como el más grande tesoro que se me haya podido confiar, amo verte sonriendo, detesto verte asi, tenso o llorando, intento de que veas que todo tiene una solución y que si perdemos el caso preferiría matarte con mis propias manos a verte padeciendo injurias en las manos de ese charlatán, pero ese no será el caso, vas a ver que ganaremos este caso, confió en que todo estará bien-

Sentí como me soltó y sus manos viajaron hasta mi rostro el cual acunó entre sus manos para luego besarme nuevamente, me estremecía completamente con solo sus besos, lo amaba mi traidor corazón siempre me delataba acelerándose con solo oír mi nombre proveniente de sus labios tenía la certeza que solo pronunciado por él sonaba como un canto.

Llegamos a su apartamento nuevamente, me sentía completamente estresado, podía jurar que mis músculos estaban más contraídos que los de un gato, pronto lo visualicé sacando unos aceites corporales

- ¿Qué haces Vox? -

Él me sonrió mientras terminaba de sacar lo que estaba buscando.

-Sé que estas muy tenso y pues hace mucho tiempo tome unos cuantos cursos de masaje, quería ser útil para mi pareja, solo que nadie fue digno de sentir mis manos alguna vez, y como no te gusta que nadie te toque, que más que lo haga yo después de todo me has dado esa confianza-

Me ruboricé, me estaba demostrando que estaba verdaderamente preocupado por mí.

-Preparare la bañera para que tomemos un baño relajante, a ambos nos hace falta, vete desvistiendo, y te acuestas en la cama boca abajo-

Lo extraño fue que obedecí como un niño, hice lo que me pidió, cuando llegó me quedé mirándolo por unos segundos.

-Oye prometo que te va a gustar o dejo de llamarme Vox-

Pronto sentí como masajeaba con cuidado mi espalda y mis hombros, realmente sentía agradable su tacto sobre mi piel comenzaba a sentir mis músculos aflojarse, no sentí siquiera cuando sus manos llegaron a mis muslos y pantorrillas, poco a poco aquel tacto despertaba mis ganas de algo más que solo eso.

-Listo, ahora vamos a darnos un baño en la tina, el agua esta tibia y tiene aromas suaves que nos ayudaran-

Me dijo, lo seguí tomándole de la mano, entre a la tina mientras me exhibía su cuerpo mientras se desnudaba, no sé porque algo como eso aún me hacía sonrojar, pasamos unos cuantos minutos en silencio cuando no lo soporte más, me coloqué sobre él, estaba hambriento de él, de su cuerpo.

-Vox querido, quiero jugar un poco-

Lo vi sonreír con complicidad era algo lógico lo que venía después, pasamos más de una hora en el baño, cuando salimos teníamos arrugados los dedos.

-Umm vaya que no me equivoque, eres una fierecilla cuando quieres ¿no? -

Me tomó entre sus brazos para luego llevarme a la cama, luego me recostó con suavidad, besándome con suavidad y dulzura.

-No tengo intención de desvelarte maña hay trabajo y tenemos un día muy largo Al-

RADIO OBSESIÓN 2: LA OTRA CARA DE LA MONEDAWhere stories live. Discover now