Je ne peux pas aimer

Capítulo 3🦋

El amor se siente como una taza tibia de té con leche; te calienta el corazón, alimenta a las mariposas y le da al espíritu sabor- Kiara Michier🌸

- Lizzy, es Arturo- me escondí detrás de su hombro.

- ¿Qué?

- ¿Tú ex? - sí David, el mismo que calza y vende--¿Qué pasa señorita Michier? Si te vieran ...- silbó, claramente estaba disfrutando de la ocasión.

-Dey, amor evita ésto - pidió.

-Arturo, ¡Amigo!- hizo hasta señas para qué lo vieran.

Arturo era un chico apuesto, el clásico niño rubio con ojos azules, alto y con físico bien esculpido-- lo que toda mujer podría querer-- Pero cuando me dí cuenta que él me estaba gustando, me alejé, terminé la relación sin ninguna explicación.
El llegó, fingí no darme cuenta de su presencia mirando a la gente a mí alrededor- con Lizzie acompañándome- no venía sólo, lo acompañaba una hermosa jóven que de hecho tenía un aspecto tan dulce qué podría dar diabetes.

- Oh por Dios ¿Eres tú? -se acercó a mí.

-cerré los ojos " Maldición, maldición" repetía como si fuera a ayudarme maldecir tanto. Miré a Arturo y ofrecí una de mis mejores sonrisas de "¿Qué diablos haces aquí?" -Hola, tanto tiempo- fué lo que salió de mi boca.

- Wow, te ves hermosa -dió un vistazo como si tuviera ganas de arrancarme la ropa de inmediato.

- fijé mi mirada en la joven que lo acompañaba--Bonita novia.

-David comenzó a reír -No es su novia.

-lo miré de la peor manera posible con la promesa de una venganza inolvidable -¿No lo es?

-Es mí hermana - él sonrió con pena.

Lizzie se puso a reír y la pobre chica avergonzada sólo ofreció una sonrisa de "No pasa nada oiga".

-Lo siento mucho, lo siento -me disculpé torpemente muy avergonzada.

-¿Pasa algo? Te noto nerviosa- él hombrecito se había puesto curioso.

-¿Nerviosa? ¿Por qué lo estaría? -- ¿Pero que es lo que sale de tu boca Kiara?, miré a una chica que estaba bailando.

--Hermano iré junto a los chicos-- se despidió -Fué un gusto volverlos a ver.

-Voy enseguida.

¿Por qué no te vas ahora?

- Sacaré a mí novia a bailar.

- ¿Qué? Pensé que éste era un día de tres - quería hacerles saber mí poco interés de quedarme sola con mi ex.

- Cariño, vuelvo enseguida -me dió un beso en la mejilla en un intento de tranquilizarme.

"¿Qué clase de amiga eres?"

-¿Y cómo has estado? - cuestionó él hombre en cuanto la parejita se marchó.

Para mí suerte un mesero pasaba con una charola de whisky, agarré uno tomándolo de un gran sorbo para después pedirle al jóven que me dejara la charola completa, de ésa manera me olvidaría de la incomodidad y superaría el nerviosismo.

-Adri ... ¿ Tomarás todo eso? ¿No crees qué...?-- yo no lo dejé terminar y tomé otro sorbo antes de hablar.

- ¿No crees que estoy demasiado grande para saber que hacer? Y si me los tomo ¿Qué? No es algo muy relevante--me senté, alcé el diminuto vaso arriba antes de volverlo a tomar, ya iban tres vasos.