"- ¿Recuerdas lo que hablamos? Bueno, tenías razón, juntos somos la mejor fusión de colores que puede existir y es lo que jamás querré perder"
🚫ESTA OBRA VIENE DE MI MENTE, ES TOTALMENTE MÍA Y ESTÁ PROHIBIDA SU ADAPTACIÓN O COPIA. RESPETE AL ESCRIT...
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—¿Y si jugamos Verdad, reto o shot?
—Eh... No estoy segura. —dudé.
—Será divertido, además, ¿Qué es lo peor que puede pasar? —habló Ryan.
Lo pensé dos veces pero terminé aceptando.
—Si nadie tiene inconvenientes...
Todos los demás aceptaron, Mark se sentó desde lejos mirándonos, no dijo que no jugaba, pero parece que en su mirada estaba que ya no eran sus juegos. Nick fue a buscar una botella, nos sentamos en un círculo con una botella vacía en el centro.
Me da que aquí vamos a terminar borrachos y sin dignidad.
—Creo que las reglas se explican por si solas pero, por si acaso, se le dará el reto al que señale la boquilla de la botella, lo da el que la haga girar, si no quiere responder la pregunta o hacer el reto debe tomar un shot de tequila. Claramente no habrán retos cómo matar a alguien pero si se pueden algunos más divertidos. El que diga verdad dos veces seguidas está obligado a decir reto la siguiente vez, ¿Entendido? —explicó John y asentimos.
—Se pide de favor que hagan los retos, porque sino pierde la gracia. —añadió Alex.
Nick fue el primero que hizo girar la botella porque fue el que propuso el juego. La botella señaló a Kari y este sonrió con malicia.
—Mi querida Karenn, ¿Verdad o reto?
—... Verdad, me das miedo.
—Aburrida. —gruñó rodando los ojos, pero luego la misma sonrisa apareció en su rostro—. Empezaré fácil, ¿Es verdad que te gusta alguien de este círculo?
—... Sí.
Las chicas giramos la cabeza bruscamente a mirarla. Parecíamos la del exorcista.
—¡¿Qué?! —exclamamos todas al mismo tiempo.
¡Oh, por Dios! ¡Kari se sonrojó!
Las mejillas de Kari se tornaron algo rojizas, rodó los ojos buscando escapar del tema.
—Superemos esto y el que sigue. Bri, vas tú.
Ella giró la botella mientras reía por lo bajo. La botella se frenó en Ryan.
—¿Verdad o reto?
—Reto.
—... Mmm... —se puso a pensar—. Vale, no seré mala porque recién empezamos, te reto a que te pongas en cuatro patas y aúlles como lobo.
Ryan la miró anonadado, nos miró a todos y volvió a ella.
—¿Qué?
—Eso. Hazlooo.
Rodó los ojos y lo hizo, todos soltamos una carcajada por eso. Ryan nos miró mal y nosotros seguimos riendo mientras se escuchaban incluso perros alrededor ladrando por el aullido.