Después del "y vivieron felices para siempre"[COMPLETO✓]

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Agradezco cada día a tu bendita rebeldía, a fin de cuentas, gracias a ella te conocí.

Sueles ser tan intransigente que a veces no sé cómo manejarte ¿Manejarte? ¡No, qué va, si no eres un coche! A veces me sacas de mis casillas, sobre todo cuando te digo que mi lado de la cama es el derecho y aun así te acuestas en él solo por llevarme la contraria, pero ¿qué le vamos a hacer? Aunque a veces me exasperes, agradezco cada día a tu bendita rebeldía, a fin de cuentas, gracias a ella te conocí.

Para Caperucita Roja, de un lobo no tan feroz