Afrodisiaco (Rauw Alejandro)

Parte 14

Pov Elena

Fuimos a donde Rauw, estaba nerviosa y no entendí por que. Nos hemos visto en la intimidad y todo eso pero sentía como mis manos me sudaban y mis mejillas se ponían rojas.

- Pero porque tu sudas? - Se paro Alejandra y me mira.

- Yo? Sudando? Que va ser, esa eres tu lo mas probable. - Dije nerviosamente.

- Yo no sudo. - Dijo jalándome para ir donde Rauw.

Dimos unos pasos más hasta que Alejandra llama a Rauw. Él miro rápido para nuestra dirección y luego me miro fijo. Sentí como el corazón se me iba a salir del lugar. Él vino donde nosotras, sentía que las paredes se cerraban, casi me da un attack pero me pude relajar.

- Alejandra, tanto tiempo. - Dijo Rauw dandole un beso en el cachete a Alejandra.

- Nos vimos como hace tres días. - Dijo Alejandra. - Ah no se si te acuerdas de ella. - Me señala.

- Claro que me acuerdo. - Sonrío pícaramente. - Elena, verdad?

- Eh... si. - Dije un poco tímidamente mirando hacía abajo.

- La otra vez no te vi con Alejandra. - Me agarro la barbilla y me hizo que lo mirada.

Sentía como me sonrojaba. Pero todavía no comprendo porque? Quizás como no estoy acostumbrada a hablarle en otro lugar que no sea su casa.

- Es que... um... yo no trabajo con ella. - Dije.

- Eh? - Me miro confuso.

- Ea que ese día, estábamos cortas en muchachas y pues Elena siempre es mi ultimo recursos. - Dijo Alejandra tratando de romper un poco la tensión.

- Bueno, eso es nuevo. - Dijo Rauw. - Entonces, en que trabajas?

- Trabajo en un bufete de abogados. - Dije.

- Tienes cara de ser psicóloga o mesera. - Dijo Rauw.

- Sabras que le dije lo mismo. - Dijo Alejandra.

- O sea no soy abogada, soy secretaría del lugar. - Dije.

- Ahh. - Dijo Rauw y Alejandra a la vez.

- Y tu porque te sorprendes? - Dije mirando a Alejandra.

- Es que se me había olvidado. - Dijo.

- Bueno chicas, me tengo que ir porque si no, me llevan. - Dijo Rauw.

Se despidió de nosotras y luego se fue. Quería que este momento hubiera durado más. Su cara cerca de la mia, hablando cosas de la vida. O sea, también me gusta estar en la intimidad con él pero también quiero hablar con el.

- Se nota que te gusta. - Dijo Alejandra.

- Que fruta? - Dije distrayéndome de mis pensamientos.

- Pichea. - Dijo caminando pa' una tienda.

- Ey! espérame - Dije corriendo a donde ella.

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