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Seokjin camina por los pasillos del supermercado. Sus tíos han llegado como visita casual a su casa (visita que ha sido planeada hace varias semanas atrás, pero ellos insisten en que es casual).

Toma un poco de verduras, unos cuantos envases con carne, un pesado paquete de arroz, varias especies raras que están escritas en la lista que le dictó su mamá (cocinar debería considerarse una ciencia con tantos nombres raros) y antes de disponerse a pagar todo, se desvía al área de golosinas.

Su área favorita es el área de golosinas desde los cinco años que acompaña a su familia al establecimiento.

Se pasea una y otra vez en ese único pasillo con dos grandes estantes repletos de botanas a los lados. Los dulces son sus favoritos, así que realmente no puede decidir entre un paquete de galletas con chispas de chocolate o un conejito hecho de chocolate.

Cuando se decide por el conejo, un niño de rizos castaños claros (parecido a alguien que ha visto en varias ocasiones) se acerca al único de esos chocolates llevándoselo. Seokjin deja caer su brazo antes alzado con la intención de detener al niño. De repente ha perdido el apetito y ya no quiere las galletas.

Camina hacia la caja para pagar, en el trayecto encuentra una bonita escena. Una chica de alta estatura sostiene un ramo de flores, frente a ella un chico, ligeramente más bajo, la mira sorprendido. Deduce que es algo así como una confesión, le gustaría quedarse a observar (secretamente Seokjin ama las escenas románticas) pero debe llegar a su casa antes de recibir llamadas amenazantes por parte de su hermana apresurándolo.

No sabe ni porque decide mirar hacia al frente, ni sabe si agradecer o no. Pero allí, al otro lado del círculo que han formado los curiosos, está el pelinegro.

Oh... definitivamente está alucinando. No puede ser que incluso en el supermercado, un día domingo, encuentre al pelinegro. Debe ser una estúpida alucinación, estúpida mente enamorada que ya imagina cosas.

Seokjin ha perdido el juicio.

Jungkook parpadea volteando como si no hubiese visto a ningún cachetoncito. No no, él no lo ha visto.

Lleva sus palmas a sus tibias mejillas tratando de enfriarlas. Su hermano menor se acerca a él con un conejito de chocolate.

-¿Me lo compraaaaas? –Su hermano es pestañas coquetas cuando pregunta.

-No -Jungkook sonríe internamente a pesar de llevar un rostro inexpresivo en el exterior. -¡¿Por qué eres tan malo?! –El rizado patalea empujando el chocolate al pecho del mayor. – Malo malo malo

-¡Jiyeong! ¡Te dije antes de salir contigo que no te compraría nada! -Gruñe agarrando su cabello desesperado cuando su hermano está abriendo sus llorosos ojos azules y el labio inferior de este empieza a temblar. – No Jiyeong, no.

-¡Insensible! - Jiyeong ladra ¿Por qué Jungkook siempre es cruel con él? ¿Por queeeé?- ¡Me costó mucho tomar este conejito antes que otro niño!

-Pues puedes ir a devolvérselo al otro niño!

-Bien! –El rostro de Jiyeong se arruga por no conseguir lo que ha querido, pero ya verá cómo se venga de su hermano. Un 'Jeon' siempre toma venganza.

-¡Bien! – Jungkook suspira al ver al rizado dirigirse al pasillo de los caramelos. -Oh... - Jiyeong mira todos los lados, es obvio que no está la persona que busca cuando gira negando- Creo que se fue -Suelta un falso suspiro-¿Ahora si me lo puedes comprar?

-¡No!

-¿Por queeeeeeé?

-¡Porqué no!

-Malooooo

Jungkook decide no seguir peleando y arrastra a su hermano hacia la salida del lugar, ha tenido suficiente por el día de hoy. Quizá prepare algo de comer para ambos y así sume puntos a su día de hermanos (obligatoriamente dictado por sus padres, y que suma unas cuantas monedas a la mesada de ambos).

-¡Oh allí está! –Su hermano salta señalando a alguien. Jungkook tose cuando lo reconoce, es Seokjin nuevamente. ¿Acaso hoy es el día de encontrar a la persona que te gusta por todos lados?

-Shhh - Jungkook intenta desesperadamente silenciar al pequeño cuando este ha empezado a gritar que debe avisar al otro "niño" que el conejito de chocolate está disponible.

-Pe-pero - Jiyeong  forma un puchero al ver al otro "niño" salir del local.

Jungkook también lo observa inhalando fuertemente antes de atreverse a hacer realidad lo que se le ha ocurrido.

Seokjin se detiene equilibrando en dos grandes bolsas todo el peso que debe cargar.

-Umm... ¿Para mí? –El mismo niño que tomo el último conejito de chocolate se ha acercado a él tímidamente extendiéndole el dulce.

El pequeño asiente con un leve sonrojo. Seokjin sonríe al tomarlo- Gracias –Dice sinceramente. Quiere preguntar que es todo eso pero antes de emitir cualquier otra palabra el niño ya está corriendo lejos, desapareciendo al voltear en una esquina.

Observa detalladamente el conejito esperando encontrar algo. Frunce el ceño dándose por vencido. Sin embargo encuentra unas siglas escritas en la oreja derecha del conejito.

'J.J.K'























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