PAKHAN

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-¿Cómo estás?

-Te mentiría si te digo que estoy bien después de todo-Bela se encontraba frente mío-Pero dejemos eso de lado, mejor dime ¿cómo estás tú?

-He tenido mejores días pero estoy bien, ¿dónde está mini Chris?-reí

-En su habitación, se quedó dormido después de todo-le dije y ella asintió

-Tengo que decirte algo-me dijo y yo solo espere a que hablara-voy a volver a Italia, Francesca también lo hará pero ella tardará un poco más

-¿Y Mari? ¿También se irá?

-Sabes que Mari es de Rusia, se irá si, pero irá con su familia, ella no irá a Italia ya que no quiere alejarse mucho de ti y mini Chris

-De acuerdo, voy a extrañarlas un montón

-Y nosotras a ti-me sonrió, la puerta fue abierta y por ahí entraba un Ezequiel algo borracho con una mujer a su lado, sentía la mirada de Bela en mí pero me negaba a voltear, Ezequiel por fin volteo hacia nosotras

-Ella si es una mujer, está dispuesta a ser feliz conmigo y hacer todo lo que yo diga, no como tú, ni siquiera puedes entregarte a mí y mucho menos logras hacerme feliz-soltó a lo que la chica a su lado rió y lo besó frente a mí, Bela iba a hablar pero yo la detuve

-No te metas en problemas ¿si? Creeme que prefiero todo esto a ser yo la que tenga que acostarse con él, ve a casa, te llamaré-le dije a lo que ella asintió, tomó sus cosas y salió de la casa

-Quiero que mires bien a esta chica ya que posiblemente sea quien se quede con tu lugar-Ezequiel seguía hablando, sabía lo que quería pero no iba a lograrlo, la chica solo se reía y eso me estaba molestando, creía que era mejor que yo y eso no era así

-Espero que de verdad tomes mi lugar, me harías un favor enorme-le dije a la chica-espero que pasen una noche increíble y que lo disfrutes lo más que puedas antes de que se canse de ti y busque a otra mujer, yo me iré a mi habitación junto a mi hijo

-¿Vas a dejar que tu esposo y yo estemos juntos?-la chica habló a lo que yo asentí

-Si por mi fuera te lo regalo, lastimosamente eso no se puede-comencé a subir las escaleras, esto ya me estaba cansando

-Adamaris vuelve acá, tú eres mi mujer y deberías pelear por mí-soltó y yo reí

-Soy tu mujer de palabra, yo no te pertenezco en nada y lo sabes, no te amo y eso jamás va a pasar

-Claro, olvidaba que amas a los muertos-eso lo dijo riendo, sabía que ese tema era fuerte para mí así que siempre me lo recordaba

-Muerto o no, mi corazón, mi alma y toda yo le pertezco a ese hombre al cual sigo amando después de todo-le dije, sin esperar una respuesta entre a la habitación de mi hijo, lo tomé entre mis brazos y me fui directo a mi habitación la cual cerré con llave.

Minutos después las risas se hicieron presentes en el pasillo, Ezequiel llevaba a la mujer a alguna habitación de aquí.

Joder, solo quería dormir pero los idiotas no dejaban de hacer ruidos exagerados, no sé cuanto tiempo llevaban ahí pero sabía que no hacían nada más que fingir que realmente lo hacían

-Juro que voy a matarte algún día imbécil-susurre para mí misma mientras veía el estúpido cuadro de nuestra boda

Me recosté esperando poder dormir, sin embargo eso no sucedía, voltee a ver a mi hijo el cual dormía plácidamente y lo agradecía.

Verlo solo me hacía sentir una pequeña nostalgia ya que esto era lo que yo había soñado con Chris

-¿Te gustaría tener hijos?-le pregunté a Christopher mientras me recostada a su lado