Un Deseo Para Navidad.

Capítulo 8: Olvídalo.

Inn "Winter Valley"

Luna se encontraba en la sala terminando de colocar el árbol de Navidad, cuando Harry y Hermione llegaron entre risas al hotel.

- Que lindo. Se ve hermoso.- dijo Hermione a Luna cuando vio el árbol.

- No tan hermoso como cuando lo decoren.- Harry se quedo sorprendido. - Ron ya se fue a dormir y George tiene que cuidar a Angelina. Y yo estoy muy, pero muy cansada porque ayude a mamá y papá, así que...este árbol es todo suyo.-

- Lunita, me encantaría, pero ya es hora de irnos a trabajar. Creo que ya...- dijo Harry.

- Al diablo con eso, es Navidad. Les voy a traer galletas decoradas y mí famoso pie de calabaza. Es el mejor del pueblo.- dijo con orgullo, mientras se dirigía a la cocina.

- Eso es cierto.- afirmo Harry de brazos cruzados. - Si te parece mandona, deberías haberla visto cuando éramos niños.- le dijo a Hermione.

- Te escuché, mugroso.- le dijo su hermana causando las risas de los tres. - Tomen.- dijo entregándoles una bandeja con las galletas y el pie.

- Gracias.- dijo Hermione.

- Ya me voy, buenas noches.- dijo Luna, para dirigirse a su habitación.

- Descansa.- le dijo su hermano. - Muy bien. ¿Estás lista?- pregunto a la castaña mientras ambos tomaban un par de esferas.

- Oye ¿En serio trabajas en Navidad? Dime ¿El trabajo te demanda tanto que no puedes descansar ni un solo día?-

- Pues las ruedas del capitalismo siguen girando. O eso dicen.-

- Sí, pero hacer que la gente trabaje en navidad...Es Navidad. Las personas no deberían temer a perder su trabajo si no van a trabajar ese día.-

- Su trabajo nunca ha estado en peligro y jamás lo estará.- dijo un poco ofendido.

- ¿Se los dicen cuando les pides que vayan a trabajar?-

- Buen punto. No lo hago. Pero lo haré, gracias.-

- Bien.-

Después de unos pocos minutos y que ambos siguieron decorando en un leve pero incómodo silencio, Harry se decidió a romperlo.

- Ah, y para que lo sepas yo les pago día y medio.-

- Wow. Día y medio, Vaya, que lindo.- dijo Hermione sarcástica.

- ¿Crees que no es justo?- preguntó divertido.

- Bueno, ahora que lo preguntas te lo voy a decir. No, no lo creo. Mínimo deberías pagarles el doble.- Harry se quedo sorprendido por su contestación. -Y creo que deberías hacer algo lindo por ellos como...hacerles regalos o...organizar una cena. Y sorpresas navideñas, esas cosas que abres y tienen un obsequio adentro. Ah, y calcetas, calcetas llenas de regalos por parte de Santa.-

- ¿Otra cosa?- preguntó sarcástico.

- Deberías de escribir sus nombres en ellas. Sería un gran detalle.-

- Bueno, ¿Y cómo voy a hacer todo eso?- preguntó entre risas.

- Te aseguro que si lo piensas un rato...lo vas a lograr. Se te va a ocurrir algo.-

Por unos segundos Harry se detuvo a mirar a Hermione a los ojos y mojo sus labios un poco para decir algo que él jamás hubiera dicho.

- Este viaje no ha sido nada de lo que esperaba.-

- Ay no me digas. Déjame adivinar. Desearías estar aquí con Draco ¿No?- preguntó divertida.- ¿Es eso? Solo dilo.- Harry solo rio ante sus ocurrencias.