A mi me encanta editar imágenes, usar programas y retocar cosas, no se porque realmente, pero me relaja bastante, casi tanto como escribir.
Pero por alguna razón en Soledad a la hora de escoger separadores preferí irme por lo minimalista, por lo que escogí el clásico corazoncito amarillo que todos conocemos.
Pero eso no significa que no hubiese intentado hacer unos algo mas vistosos, tengo varias ideas descartadas y entre ellos unos que me gustaron bastante. El problema estaba en que eran, pues, algo serios, y aunque en si la historia también tiene bastante drama estamos hablando de un mundo basado en un anime de comedia absurda. Aun así no quería simplemente borrarlos porque el diseño en si me gustaba, por lo que pensé que seria bueno usarlos para inaugurar este libro.