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Es hoy, el dia en que conocerian al novio de megumi, gojō y getō hicieron un drama diciendo que el pequeño habia dejado el nido, megumi solo quería salir de ahi y nunca haber abierto su boca. Estaban en el sofa del apartamento de los gojō dandole "la charla" a un megumi sonrojado el cual estaba esperando que su novio llegara y que acabara esa pesadilla, iba a seguir lamentándose cuando escucho el timbre del apartamento sonar, sabe quien es y espera que su tutor y getō no lo dejen en vergüenza.
Baja las escaleras y ve a sus tutores transportarse y abrir la puerta, del otro lado estaba un chico con cabello rosa, tatuado, fumando un cigarrillo y con una postura amenazadora, que hace el estúpido hermano gemelo de su novio? no lo quiere ahi, sus tutores malinterpretar la situacion.
- quien eres tu? No me digas que eres el novio del pequeño megumi- demasiado tarde, empezaron a "susurrar" y decir que no aceptaran a un pandillero como futuro esposo de su pequeño. -hey idota, itadori subira en unos minutos, tuvo unos problemas a la hora de llegar, me largo, adios- las expresiones de esos dos es unica y parecen que sus pocas neuronas se murieron. Minutos después vuelve a sonar el timbre, baja para recibir a su novio el cual esta hablando y riendo con gojō y getō, espera hablando y riendo? - gumi tu novio es muy chistoso, suguru lo podemos adoptar?- oh no - amor, no lo podemos adoptar, megumi nos matara- tiene razon - megumi no sabia que tus padres eran tan geniales, hasta me proponieron que tenia que casarme contigo- escucharlo decir eso provoca que me sonroje, itadori yuuji es la persona mas dulce y estupida que existe.
Tendrá que soportar a dos adultos con comportamiento infantil y resulta que tambien tiene que soportar a yūji con esos dos idiotas, es mucho para él - Itadori, nos vamos, no pienso soportar a gojō hablando Idioteces- haciendo pucheros, yuuji se despide y promete volver para terminar de discutir el por qué el invierno es mejor que el verano - ¡yūji-kun no olvides traerme dulces y hacer que megumi deje de tener cara seria, nos vemos!- definitivamente fue mal idea haber abierto su boca.
