-SMILE-★

Aún recuerdo el día en que te vi por primera vez, me preguntaba quien era el dueño de esa sonrisa tuya, a pesar de estar en una silla de espera para ver a un psicólogo expresabas tanta felicidad que no entendía y al final fui tonto, me perdí en tú sonrisa.

Esa hermosa sonrisa tuya, fue mi mayor error haberme perdido en ella y caer en las garras de un lobo con disfraz de corderito, pero que decir si me sonreirás así yo siempre estaría a tus pies, porque ese era tu efecto Lee Félix.

Estuve observándote durante una semana tal vez. Siempre tenías una sonrisa en tu hermoso rostro que inevitablemente volteaba a ver y me perdía en tu rostro. Tu amigo ese que te acompañaba siempre a tus citas con el doctor empezó a notarme, pero no quería su atención, quería la tuya. Aunque en ese momento agradecí a Chan, hoy en día ya no sé que decir. Chan hizo que me notaras, cuando nos conocimos yo estaba muy nervioso ¡el chico de la sonrisa me estaba hablando!, solo yo y mi corazón estuvimos en un frenesí absoluto.

Luego de que nos conociéramos comenzamos una amistad, ya no solo nos veíamos en el consultorio, podíamos vernos en un café o en una plaza. Conocí a tus amigos y tú, a los míos, fue genial como todos pudimos acercanos entre sí.

Tú me gustaste tanto en ese momento que me perdí en el sentimiento de quererte cerca.

Más.

Más

Y más.

Tu bonita sonrisa era mi mayor problema, si tú sonreias, yo solo quedaba embobado, tu solo sabías eso y lo usabas a tu favor, debí darme cuenta Lee Félix.

Tu bonita sonrisa seguía apareciendo mientras me usabas y yo solo hacia lo que quisieras.

No debí escucharte cuando dijiste que Jeongin solo hablaba basura de mi, no debí escucharte cuando me dijiste que Hyunjin solo estaba a mi lado porque estaba enamorado de mi, no debí escucharte cuando me dijiste que dejara de tener contacto con Chan cuando viste que él me advirtió, me advirtió de ti. Hasta hace un poco tiempo lo entendí .

Tu hermosa sonrisa, esa que estuvo en nuestras primeras salidas.

Esa sonrisa que estuvo cuando te noté por primera vez.

Esa sonrisa que me hacia volar a otro mundo y perderme.

Esa sonrisa que me manipulaba con solo aparecer.

Esa maldita sonrisa tuya que me dejó mal en todo momento. Yo fui muy ingenuo todo el tiempo, debí entender porque de un tiempo a otro ya no tenías amigos o porque tus padres te dejaron a tu suerte cuando en un tiempo fuiste su luz, debí entender a los chicos cuando dijeron que te dejara.

Pero esa sonrisa tuya no podría dejarla. Se había convertido en algo cotidiano que necesitaba conmigo, así como, un diabético necesita insulina, cuando la usaste por primera vez yo no pude dejarla, porque tu sabías eso y disfrutaste cada vez que hice lo que deseabas. Eras un manipulador Félix, pero yo no vi eso a tiempo.

Esa sonrisa que recuerdo nunca dejó tu rostro, estuvo en nuestros momentos más importantes...

El día en que pedí que fueses mi novio estuvo ahí.

El día que pasé el examen a la universidad estuvo ahí.

El día en que superaste tu audición estuvo ahí.

El día que nos mojamos en la lluvia y me dijiste que me amabas por primera vez estuvo ahí.

El día que fuimos a la biblioteca y me diste ese collar tan hermoso que siempre usaba estuvo ahí.