Lo que el tiempo se llevó

Capítulo 16: Confesión

48 horas, era el tiempo que Chris había pasado sin señales de vida de Noah, estaba nervioso, asustado, enfadado y preocupado.

Sabía que no debía dejarlo ir solo a ese pueblo del infierno, tanto tiempo desaparecido ya no es un simple olvido sino algo más serio.

Tenía que confesarle todo a Stiles, enfrentaría su mirada acusadora y sus reproches.

Ahora se encontraba sentado en el sofá de la sala esperando a que Stiles llegara del trabajo, sus manos sudaban y seguía repasando en su mente las palabras exactas para evitarle un ataque a su hijastro.

La puerta principal se abrió, su corazón dio un salto por el susto y los nervios.

- Hey Chris – saludó Stiles colocando en una mesa lo que parecían ser planos con algún diseño de moda.

- Stiles, tengo algo importante que decirte – empezó a hablar Argent con miedo a la posible reacción del castaño.

- ¿Pasó algo malo? –

- Siéntate, por favor –

Él obedeció la petición algo extrañado, sea lo que sea que le fuera a decir parecía muy serio.

- Primero, yo no estuve de acuerdo con todo este asunto, me vi obligado por las circunstancias – parecía bastante preocupado.

- Chris, ya dime lo que está pasando – estaba perdiendo la paciencia rápidamente.

- Tu padre regresó a Beacon Hills hace dos días y se comunicó conmigo esa noche para hacerme saber que llegó a salvo, pero desde ese momento no he vuelto a saber nada de él – dijo fuerte y claro, era mejor arrancar la bandita de un tirón.

Stiles no dijo nada, su mirada de plantó en el piso de madera, se levantó y le dio la espalda.

- Sé que debes estar enfadado con nosotros, estás en todo tu derecho, pero presiento que algo le pasó a Noah y debemos ir a salvarlo – se puso de pie y trató de acercarse a Stiles.

- ¿Por qué? – preguntó en un susurro.

- ¿Qué dijiste? –

- ¿Por qué regresó a Beacon Hills? –

- Noah recibió una llamada del asilo donde está hospedado tu abuelo, él se encontraba grave y requerían la presencia de tu padre para hablar de la situación de Elías – explicó lo más calmado posible, el castaño aún no volteaba la mirada ni hacía alguna acción que apuntara a que se sentía enojado, triste, consternado o preocupado, solo estaba ahí parado.

Stiles levantó sus manos y las puso sobre su rostro, se escuchó una fuerte aspiración y exhalación.

- ¿Cuándo planeaban decirme esto? – por fin se dio la vuelta y su expresión era de enojo.

- Noah no quería que lo supieras porque, al igual que yo, no lo dejarías irse solo y él no estaba dispuesto a permitir que revivieras lo que sucedió hace años –

El castaño suspiró, cerró los ojos tratando de quitar la sensación que había caído sobre su corazón.

- ¿Cómo te sientes? – quiso saber Argent.

- Eso no importa, ahora debemos averiguar lo que le pasó a mi papá – subió las escaleras dirigiéndose a su cuarto con Chris siguiéndole el paso.

- Espera ¿Quieres ir a Beacon Hills? –

- Es momento de superar el pasado y con más razón si mi padre nos necesita –

- ¿Y los niños? –

- ¡Castiel! – exclamó al aire.

Un aleteo se escuchó detrás de ellos y la figura de Castiel Shurley se hizo ver.

- ¿Qué sucede Stiles? – preguntó con su particular voz rasposa y su ceño fruncido.

- Papá se fue al pueblo y Chris no ha recibido noticias de él en varios días, tú y Sam son las personas más adecuadas en las que pienso para encomendarles el cuidado de mis hijos ¿Cuento contigo? – habló Stiles muy rápido, su hiperactividad surgió de repente.

- Por supuesto, hablaré con Sam y Dean – con eso dicho, desapareció.

- Buscaremos a mi padre y si aún está con vida, le patearé su arrugado trasero –