Querida esposa

《Nuestro inicio》

Era una hermosa tarde soleada en el gran imperio de Oriente cuando a el Emperador Osis III , le trajeron  la noticia de que la esposa del Duque Trovi habia dado a luz a una hermosa niña, esta noticia muy buena para el ya que podria comprometer a su herdero con la pequeña, ya que esta familia habia un largo legado emperatrices las cuales solian ser muy buenas como si fueran diseñadas para el puesto 

—Por favor marques Mattiew hagale llegar un regalo a la familia junto una carta de felicitacion, se que es muy pronto pero quiero que se haga la propuesta de compromiso para que en cuanto empiece a caminar esa niña sea criada para ser una buena Emperatriz sera una buena compañera para Sovieshu—

Esta propuesta fue motivo de celebracion en la casa Trovi tener asegurado el futuro de sus hijos era primordial para los padres mas siendo de aquella epoca, claro que aceptaron era una oportunidad que no podian desaprovecharla, depues de esto la noticia se extendio por todos los periodicos con la primicia que decia "el joven principe y su compromiso prematuro ". 

Aunque entre la nobleza e incluso generaba polemica el que dos infantes fueran comprometidos de manera tan apresurada, se debia admitir que este acto provocaba estabilidad en el imperio, así evitarian problemas futuros con una Emperatriz inepta, ya que, ahora sus futuros gobernantes serian igual de capaces.

 Pero ¿que pasaba por la cabeza del pequeño principe Imperial? en realidad ese pequeño pelinegro solo tenia en mente jugar con uno de sus tantos juguetes hechos por artesanos de la corte y si acaso memorizar los modales que su institutriz le obligaba aprender, cuando conocio a la casi recien nacida Navier trovi no le dio mucha importancia. 

Todo parecia ir bien hasta que despues de un tiempo comenzaron los celos por parte del pequeño ya que la madre de Sovieshu siempre quizo tener pequeña niña, lo cual desgraciadamente no se pudo, asi que adopto un papel materno hacia su futura nuera, claro que esto provoco que Sovieshu tomara cierto rencor a la pequeña asi que a su corta edad de cuatro años decidio confrontar a Navier de tan solo de un año y medio de edad, mientras las niñeras reales se tomaban  un pequeño descanso 

—Mira niña, no puedes robar a mi mami eso es algo muy...¿como dice mi papá?...ahh...si es algo totalmente indignante—

La rubia solo ladeaba la cabeza realmente confundida no entendia ni una sola palabra de las que el mayor expresaba con tanta seguridad, aunque le parecian graciosas las imitaciones que este hacia del Emperador, por su parte Sovieshu seguia con su discurso pero se molesto al ver que la contraria reia a carcajadas por lo que sonrojado lleno de vergüenza y señalandola le dijo

—¿C-como te atreves? y-yo Sovieshu. h-hablo en serio–

La pequeña reia a carcajadas pero al  ver la mano señaladora de Sovieshu la tomo levantandose diciendo con una suave sonrisa mientras alzaba su otra manita

—Sovie.....Sovieshu...!Sovieshu!—

—Si...ese es mi nombre—

Sovieshu no entendia lo que ocurria  hasta que llego su futura suegra la cual parecia muy feliz al ver que Navier habia dicho su primera palabra y por fin se habia levantado asi que tomo la pequeña en brazos, pero el pequeño niño jalo un poco del vestido de la mayor 

—¿Por que esta tan feliz?—

—Oh principe.la primera palabra es muy importante, ademas debe estar feliz....fue la primera palabra de su futura esposa no muchos podran presumir eso—

Despues de este suceso Sovieshu empezo a presumir esto, generando que se volviera mas unido a Navier ya que la hacia repetir palabras que el ya conocia le parecia algo divertido de hacer

—Navier....di chocolate—

—"chocholate" —

Sovieshu dio con una suave carcajada junto a la pequeña, a este le gustaba pasar tiempo con alguien que se aproximara a su edad y no solo estar rodeado de adultos.

Aunque estaba Kosheir estos no congeniaban, por lo que ambos preferian mantener su distancia,esto funcionaba ya que se evitaban conflictos entre ambos.