Lo que un héroe hace. | Kirishima Eijiro x Bakugo Katsuki

#O2.

Bakugou tomó su celular y llamó a su agencia para informar sobre la situación; al instante todos se pusieron en marcha. Estaba orgulloso, su agencia era una de las más productivas dentro de todas las agencias de héroes, y es que él era quien aceptaba al personal, así que, si no cumplía con sus condiciones, lo sacaba a patadas a la calle. Y las cosas habían funcionado bastante bien hasta ese momento.

—Dynamight-san —Una de sus asistentes corrió hacia él apenas cruzó las puertas de su edificio.

—¿Qué tienes? —preguntó. Era obvia la razón por la cual lo interrumpía.

—Estuvimos investigando los antecedentes que nos fueron entregados por la policía. Resulta que existe un héroe profesional que estuvo directamente implicado con los barrios rojos y la venta de las primeras versiones del Trigger por varios años de su carrera.

—¿Quién es?

—Fatgum-san.

—¿Y por qué no está ya aquí? Quiero terminar con esta mierda lo más rápido que sea posible.

—No entiende, señor, Fatgum-san...

+

Bakugou quizás debía haberse regañado mentalmente por no recordar el nombre del héroe que participó junto a sus compañeros en el rescate de la niña con un quirk sorprendente, ese donde participaban unos yakuza bastante desagradables y aquel en el que no pudo estar porque no pasó su examen de licencia en la etapa final.

Sin embargo, le importó tan poco ese momento que no le sorprendió haber olvidado incluso las desgarradoras noticias que llenaron los titulares por semanas completas, todos lamentándose el suceso y la desgracia que tuvo que vivir uno de los héroes más queridos por muchas personas. Fatgum era conocido por trabajar en los barrios bajos de la ciudad y por siempre resaltar con su enorme y adorable tamaño, además de tener una personalidad muy carismática; dueño de una agencia y un héroe con moral inquebrantable, perdió en una batalla contra dos de los villanos y estuvo a punto de morir.

Lograron salvarlo, pero sus heridas fueron tantas que le tuvieron que quitar su licencia de héroe debido al descanso indefinido que necesitó. Con el pasar de un año más, se confirmó su retiro, pues era incapaz de usar su quirk correctamente sin hacerse graves daños. Muchos cuestionaron las decisiones de los demás héroes. Es decir, dejarlo sólo contra dos enemigos tan poderosos no debió ser buena idea, pero Fatgum apareció en cada entrevista dejando en claro que fue su decisión y que lamentó no haber podido ayudar más a su equipo.

Bakugou ni siquiera recordaba bien su rostro, sólo ese tono naranjo de sus ropas que siempre se le hizo muy llamativo, así que cuando entró a la habitación del hospital en la que Fatgum se encontraba, ver al antiguo héroe observando directamente la puerta, fue como conocer por primera vez a una persona. Ni más, ni menos.

—Pudiste darnos la información que queríamos por teléfono, ¿por qué necesitabas que venga yo personalmente? —preguntó el rubio, acercándose a la cama.

—¿Tengo que pedir disculpas por desear un poco de emoción en mi vida? —preguntó el hombre, soltando una pequeña carcajada después—. Además, me llamó tu asistente, Dynamight, ¿ni siquiera pudiste hacer tú la llamada?

—Estoy ocupado con otras cosas.

—Vaya jóvenes de hoy en día, eh —Fatgum sonrió con resignación—. Mi única condición fue tenerte aquí presente, así que hablaré.

—De acuerdo.

Bakugou jaló una silla y se sentó en ella con tranquilidad. ¿Qué podía decir? Ver a ese ex héroe en tan lamentable estado, le trajo vagos recuerdos del pasado. Él nunca pudo estar cerca de All Might antes de que este último falleciera. Y ni siquiera porque no se le permitía, sino porque siempre encontraba al estúpido Deku llorando ante el héroe caído, incluso durante sus últimos suspiros de vida. Sin embargo, Bakugou lo vio más de una vez a la distancia, el lamentable fin de un héroe que entregó su vida completa por una ciudad que lo olvidó apenas existió un nuevo héroe número uno.