24/05/2021 - Universo Alternativo

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Langa se había perdido ¿cómo es que eso había pasado? Realmente no lo sabía, solo se encontraba practicando snowboard y cuando menos se dio cuenta se había perdido, probablemente sus papás lo estarían buscando a esas alturas.

El de ojos azules siguió caminando, intentando encontrar la forma de volver, pero lo único que consiguió fue adentrarse más al bosque, estaba cansado, con frío y hambre, solo quería estar en casa pronto.

Miró al cielo y la luna brillaba con intensidad, era tan hermosa, al menos podría apreciar algo tan bello como la luna llena.

A lo lejos escucho un aullido ¿acaso había lobos cerca? Eso definitivamente no era bueno, probablemente lo terminarían atacando, ay no, eso era malo, debía buscar un refugio cuanto antes.

Pero su curiosidad era más, con cuidado de no hacer mucho ruido se acerco hasta donde venía aquel aullido, en una roca se encontraba un hermoso lobo, su pelaje no era como la de los lobos comunes, no este era distinto, su pelaje era de un color rojo muy hermoso.

—Wow, nunca antes había visto un lobo así —dijo para él mismo, estaba más que fascinado.

Intentó alejarse de forma cautelosa, pero sin querer piso una rama, junto al sonido que está causó el lobo volteo a verlo, tenía unos ojos mieles muy bonitos. La criatura comenzó a acercarse hacia él, estaba siendo cauteloso, Langa intentó alejarse, pero tropezó y cayó al suelo.

—N-no me comas —dijo con miedo, pero sin poder dejar de estar tan encantado con la criatura.

Cerró los ojos, esperando a que el lobo se lo terminará comiendo, pero aquello nunca pasó, el de ojos azules abrió los ojos y enfrente de él se encontraba un hermoso chico de cabello pelirrojo, tenía cola y orejas de un lobo.

—No voy a comerte —dijo el chico ladeando la cabeza.

Langa se sonrojo demasiado, su voz era bonita, pero eso no es lo que lo había hecho sonrojarse, si no el hecho de que aquel bello chico estaba desnudo, el de ojos azules desvío la mirada.

—Estas desnudo —fue lo único que se le ocurrió decir.

El lobo se sonrojo demasiado al darse cuenta de eso, había dejado su ropa detrás de unos arbustos para no romperla y que sus papás lo regañen.

—Y-yo... Eh, ahora vuelto —y convirtiéndose en un lobo se fue de allí.

Langa sacudió la cabeza intentando sacarse aquella imagen, una vez que estuvo más tranquilo siguió las huellas de lobo, quería saber quien era o mejor dicho que era.

Ambos se cruzaron en el camino, el chico de cabello rojo ya se había vestido, ahora era menos vergonzoso mirarlo.

—Lo siento por eso, cuando me convierto en lobo tengo que quitarme la ropa o esta se rompe —dijo algo avergonzado.

—Oh, entiendo —dijo Langa pensativo.

—Si y por si aún tienes la duda soy un hombre lobo, y me llamo Reki ¿tu como te llamas? —dijo con una sonrisa en el rostro.

—Oh, me llamo Langa y soy solo un humano que se perdió en el bosque —el de ojos azules se rasco la nuca.

—Eso suena mal ¿necesitas ayuda para volver? —Reki lo miro.

—Uh... Si, si puedes ayudarme te lo agradecería mucho —dijo algo avergonzado.

—Entonces te ayudaré —le dijo con una gran sonrisa—, tengo un gran olfato y me es fácil encontrar caminos.

—¡Oohh! Muchas gracias.

—Si quieres que sea rápido tendré que convertirme en un lobo —dijo el chico pelirrojo pensativo.

Detuvo su caminata y se escondió detrás de un arbusto, luego de uno segundos el hermoso lobo de pelaje pelirrojo salió.

—Sube, así iremos más rápido —dijo haceudbo un movimiento con la cabeza para que subiera.

Langa lo dudo, pero al final subió al lomo de aquella criatura, su pelaje era tan suave y calentita, el de cabello azul disfruto de abrazarlo hasta que este se detuvo.

—¿Vives por aquí? —la voz de Reki lo devolvió de la realidad.

El de ojos azules se obligó a mirar el lugar, efectivamente vivía cerca de aquel lugar, soltó un suspiro y bajo del lomo del bello animal.

—Si, gracias por traerme —dijo acariciando la cabeza del lobo.

—No es nada.

—¿Te volveré a ver? —pregunto Langa mirando al lobo.

—Tal vez... Si te vuelves a perder, definitivamente allí estaré —le guiño un ojo.

Langa no pudo evitar sonreír, antes de que dijera algo, aquel lobo se fue corriendo.

Soltó un suspiro, lo volvería a ver estaba seguro de eso, por algo debía volver a casa.

Renga week 2021Where stories live. Discover now