𝕃𝕒 𝕙𝕖𝕣𝕞𝕒𝕟𝕒 𝕕𝕖 𝕊𝕥𝕒𝕟𝕝𝕖𝕪 𝕌𝕣𝕚𝕤, 𝕃𝕦𝕔𝕪 (𝐁𝐢𝐥𝐥 𝐲 𝐭ú)

Capítulo 14: La batalla a pedradas.

Después de limpiar, fuimos a pasear en nuestras bicis. Todos la teníamos de la mano, menos Richie, que giraba alrededor nuestra. Se estaba quejando de ser nuestro ''portero''.

Richie:

No, si me gusta ser vuestro portero.¿No podíais tardar más?

Eddie:

Oh, cierra la boca, Richie.

Stan:

Cállate ya, Richie.

Richie:

Claro, que cierre la boca el bocazas. Yo no limpié la sangre del lavabo imaginando que era la vagina de la madre de Eddie en Halloween.

Bill:

No lo imaginó.-Cuando lo dijo todos nos detuvimos, incluso Richie.-Y-yo también vi algo.

Stan:

¿Viste sangre?-Y Billy lo miró, y negó con la cabeza.

Bill:

Sangre no. Yo vi a Ge-ge-Georgie.-Todos lo miramos extrañados.-Parecía tan real... Y también había un...

Eddie:

Payaso.-Interrumpió y miró al suelo.-Yo también lo vi.

Lucy:

Con la cara blanca y una sonrisa de ceja a ceja.-Añadí, con cara pálida. Bill nos fue mirando a todos:primero a Ben, que asintió con la cabeza, luego Stan y yo. Todos vimos al payaso.

Richie:

Espera, ¿sólo los vírgenes ven esa cosa?¿Por eso no lo vi?-Dijo, y Billy giró la cabeza porque oyó un sonido. En realidad, todos lo oímos.

Eddie:

¡Oh, no!Es el coche de Belch Huggins. Tenemos que irnos de aquí.

Richie:

Sí.

Billy:

¿Esa bici no es del niño desescolarizado?

Eddie:

Sí, es la de Mike.

Lucy:

Creo...que tenemos que ayudarlo.-Dije con un poco de pereza.

Bev:

¡Sí, vamos!-Y soltó su bici y la dejó caer. Los demás la dejaron en el suelo también. Excepto Stan y yo. Yo puse la pata de soporte y Stanley igual, aunque yo tarde menos. Corrí junto los demás, pero vi que Stan seguía allí y me acerqué a él.

Lucy:

¡Stanley, vamos!-Y aceleró el paso. Allí pudimos ver que Henry Bowers estaba pegando a Mike. Bev pensaba tirarle una piedra, y yo la imité. Las tiramos; Bev a la frente de Henry y yo al pecho. Cuando llegó Stan, dijo con la boca abierta:

Stanley:

¡Buen tiro!

Beverly y Lucy a Stan:

Gracias.-Dijimos mientras Mike se acercaba arrastrándose para ser protegido. Cuando todos llegaron, también cogieron piedras. Víctor Criss ayudaba a Henry a levantarse y yo, mientras, ayudaba a Mike a lo mismo.

Henry:

Os esforzáis mucho, Perdedores. Tranquilos, os la podéis tirar. Sólo tenéis que pedírselo amablemente, como hice yo.-Dijo restregándose las manos ahí abajo. Todos miramos a Bev, casi con cara de asco y de duda a la vez. De pronto y con furia, Ben gritó y le lanzó una piedra a Henry. Le dio en el mismo lugar que Beverly antes. Luego, Bev le tiró otra con un pequeño grito, y yo hice lo mismo.