𝕃𝕒 𝕙𝕖𝕣𝕞𝕒𝕟𝕒 𝕕𝕖 𝕊𝕥𝕒𝕟𝕝𝕖𝕪 𝕌𝕣𝕚𝕤, 𝕃𝕦𝕔𝕪 (𝐁𝐢𝐥𝐥 𝐲 𝐭ú)

Capítulo 29: Entrando al pozo

Ya íbamos por las calles de Derry en dirección a la Casa Neibolt, portando en nuestras mochilas armas y linternas. Cuando llegamos frente a la casa, ya se notaba una presencia un tanto… extraña. Yo, por lo menos, me sentía espiada. Bajamos de las bicis, Bill iba en frente.

Bill:
Preparaos, chicos.- Ordenó, y todos sacamos linternas, cosas punzantes y, en el caso de Mike, la pistola para matar ovejas. De repente, Richie encontró una botella de vidrio que rompió contra la barandilla de las escaleras de la casa.

Como era de esperar, la rompió mal. Todos nos quedamos mirándolo

Lucy:
Richie, si no sabes hacerlo bien, no lo hagas.-Dije mientras me reía un poco, aunque no fuera el momento. Richie puso cara de “mejor me quedo quieto y ya” y tiró lo que le quedó de la botella.

Entramos a la casa en este orden: Bill, yo, Richie, Eddie, Mike y Ben. De repente, sentí un escalofrío, por lo que miré hacia mi hermano, que aún no había entrado.

Ben:
¿Stan?- Todos le miraron. Mi hermanito estaba casi temblando.

Bill:
Stan, tenemos que ir todos.- Dijo, para luego tocarme el brazo para que pudiera convencerlo mejor. Yo le miré de reojo y asentí.

Lucy:
Venga, Stanny, si te quedas sólo afuera, podría atacarte.

Billy:
T-tiene razón, si nos separamos como antes, el payaso n-nos matará uno por uno. Pero si nos m-mantenemos todos juntos, ganaremos.- Mientras decía todo esto, Stan miraba al suelo. No tenía otra opción. Di un paso hacia él y le extendí la mano.

Lucy:
Vamos, Stanley, tú puedes, confío en tí.- Le sonreí. Él dió un paso al frente y me agarró la mano. Luego, volvimos a estar detrás de Bill, que nos guiaba.

Íbamos iluminando la estancia con nuestras linternas, hasta que llegamos a la habitación donde se situaba el pozo.

Richie:
Eddie, ¿tienes una moneda?- Dijo mirando al fondo del pozo.

Eddie:
Ni loco pido un deseo en este puto pozo.- Ahora, todos mirábamos el fondo del pozo.

Ben:
¿Beverlyyy?- Rebota el sonido con el eco.

Stan:
¿Cómo vamos a bajar?- Miró a Bill, y éste se quedó pensando.

Lucy:
Los pozos tienen una cuerda para poder recolectar el agua, tiene que estar por aquí… ¡Ahí está! - Dije iluminando con la linterna una esquina de la estancia. La tomé, se la dí a Bill y él la ató para poder bajar.

Primero fue Bill, luego bajé yo

Lucy:
Fue un mal día para llevar falda…- Susurré, aunque con el eco se escuchó.

Luego bajó Eddie, teniendo cuidado con el brazo escayolado, Richie, Stan y Ben. Cuando fue el turno de Mike, que era el que nos ayudaba con la cuerda, escuchamos un grito de dolor y forcejeos: alguien le estaba atacando. Todos empezamos a llamarle. De repente, alguien se asomó. Pero no era Eso, sino Henry Bowers, que tenía la cara llena de sangre.

Henry:
Beeeee, beeee.- Susurraba con cara de loco, mientras los demás llamaban a Mike o comentaban lo demente que estaba Bowers. Súbitamente, nos quitó la cuerda para que no pudiéramos subir.

Todos estábamos llamando a Mike mientras nos lamentábamos por lo de la cuerda. Escuchábamos forcejeos y gritos.

Bill:
Y-yo… tengo que subir.

Eddie:
¿Qué?¿Y cómo?- Chillaba de histeria.

Lucy:
Podríamos subir dos personas si pegamos espalda contra espalda y caminamos por la pared del pozo y haciendo fuerza.

(Aquí adjunto imagen para los que no me comprendieron)

Antes de que Bill opinara sobre mi idea, Bowers caía por el pozo.

Richie:
¿Qué pasó?- Todos miramos arriba, y Mike estaba sano y salvo.

Mike:
Estoy bien.- Dijo mientras recargaba su pistola, aunque luego se le cayó la bandolera con las recargas.- ¡Noo!

Mientras Mike recolocaba y bajaba por la cuerda, me dió otro escalofrío, por lo que miré detrás mía. Ya no estaba Stan.

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Weno, gente, me voy a poner a full para terminar esta historia y empezar mis otros proyectos (spoiler: los fanfics que voy a hacer tienen su propia lista de lectura)