𝗟𝗮 𝗻𝗼𝘃𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗺𝗶 𝗮𝗺𝗶𝗴𝗼. ❘ [𝗗𝗘𝗩𝗜𝗘]

➪ 𝗘.

| Y estoy aquí de frente. |

Narra Mal.

Me encontraba en, sí, adivinaron, la habitación de Doug. Tenía dos días enteros sin verlo y necesitaba respuestas, necesitaba saber que había pasado desde que Evie se lo llevo de aquel campo.

Por que desde ahí no les vi más. A ninguno.

— ¿Entonces Doug? — pregunte

— ¿Entonces que lunática? — dijo girando su silla para quedar frente a mi.

— Es obvio lo que preguntaré. ¿Te la cogiste? — dije levantando las cejas

— ¡Mal! Dios, es la novia de mi mejor amigo.

— No ha sido un impedimento para besarla, ¿Por que lo sería ahora? — dije tomándolo de los hombros

Él solo me miraba serio. Era obvia la respuesta. Y ahora Doug se sentía culpable. Siempre ha sido así, cuando hace algo que le gusta y después se arrepiente pone la misma cara que ahora.

— Deberías ir a confesarte con un sacerdote y sacar todos tus pecados. Pecador. — reí

— ¿Y que le confesaré? ¿Me cogí a la prometida de mi mejor amigo que además es la futura reina de Auradon?

— Bueno. Ya que lo dices tú, si suena a una infidelidad bien cabrón. — reí

— No puedo hacer eso Mal. — decía

Caminaba de un lado a otro. Me estaba estresando a mi.

— Mira amigo, si las infidelidades fueran malas, la gente no las haría. — reí

El río junto a mi. Doug tenía una risa bastante reconocible, pero aquella no lo fue. Fue distinta.

— Si. Hablando de eso Mal. Necesito preguntarte algo. — dijo

— Habla.

Narra Evie.

Iba camino a mi habitación, como suelo hacer después de clases, hoy tenía muchas cosas que hacer, desde un vestido para Audrey hasta un proyecto de química final.

En química lo saben, pediría ayuda de Doug.

Si tan solo no fuera incómodo verlo después de aquella confesión y aquel acontecimiento.

¿Se lo contaría a Mal? Pienso en eso todos los días.

¿Cómo tomaría Mal el hecho de que tuve sexo con su mejor amigo y en la cama en la que ella normalmente toma sus siestas? Definitivamente no estaría muy contenta.

Narra Doug.

— Habla.

— El día que Evie estuvo aquí. Antes de hacer cualquier cochinada que tu mente esté pensando en este momento. Me dijo algo que me dejó pensando.

— ¿Qué? ¿Te dijo 'te amo'? — río y yo junto a ella.

Una risa sarcástica.