A kilómetros de ti || Yamaguchi Tadashi x tú (fem)

Capítulo 3

『Latinoamérica horas antes』

Estabas avanzando la tarea con tu amiga y ella seguía revisando tu celular.

-Creo que se fue a dormir temprano, ahora entiendo porqué respondió rápido.

-¿Por qué?

-Ahora soy yo quien se pregunta si todo está bien ahí dentro.- puso su dedo índice en tu frente- No quería perder el tiempo y así hablar más contigo, ahora tengo varias teorías acerca de su personalidad.

-Ay no, y aquí vamos.

-Sólo escucha. Primero, puede que sea alguien desesperado en buscar una pareja y...

Le interrumpes- Pero esa es la razón por la que descargas una app de citas.

-Aún no termino, no te me adelantes. - asentiste- y que sólo busque algo para el momento. Segundo, empieza siendo alguien lindo, y termina siendo un fuckboy todo culero que usa la app para sus nuevas víctimas. Y tercero, es alguien lindo, una persona tímido que por eso no consigue pareja y la app es su única opción. - se posó uniendo sus manos para apoyar su mentón.

-¿No crees que estás sobreanalizando la situación?

-Mira quién lo dice, ahora lo defiendes.

-No es eso, simplemente, ¡agh!

-Bueno, mira la hora, ya será mejor que me retire.

-¿No vas a comer aquí?

-¿Qué hay?

-Fideos instantáneos, hay Maruchan y Ajinomen, ¿cuál quieres?

Ella simplemente dio unas fuertes carcajadas.

-Oye, no quiero cocinar nada aún, me da flojera cocinar sólo para dos.

-Entonces, ¿estos días comerás eso no más?

-Quizás pida comida.

-Bueno, dame la Maruchan de pollo.

Fuiste a preparar la "comida" para tu amiga y para ti. Pasaron la tarde jugando, viendo películas y entre otras actividades. Todo iba bien, hasta que sonó tu teléfono. A tu amiga se le prendieron los 5 sentidos y fue en búsqueda del aparato.

-¡Oye, ven aquí! ¡Esta es la mejor parte!- fuiste tras ella.

-¡Bingo! Sí es él.- te dio tu teléfono.

-Eres muy intensa, ¿sabías?

Ella sólo se encogió de hombros. Abriste la app y te viste con la sorpresa de que el mensaje fue cortante.

-¿Qué pasa? ¿No piensas escribir?

-Es que no sé que poner.

-¿Qué puso?

Tu amiga se acerca a ti, mira el teléfono y se pone a pensar.

-Si no estuviera aquí, ¿le hubieras dejado en visto, no?- te encogiste de hombros- Que suerte para ese chico que estoy aquí.

-Sí, cómo no. ¿Qué le pongo?

-Pregúntale si está en algún club, por lo de la camiseta.

-Ah... claro.- le enviaste el mensaje- Listo.

-Bien, me voy a duchar. Por cierto, ¿iremos al taller mañana?- hablaba mientras acomodaba sus cosas.

-Posiblemente, no tengo nada que hacer estos días.

-Bien, menos mal traje mis cosas, me daría pereza ir a mi casa.

Se fue al baño y tú te dirigiste a tu cuarto para acomodar el espacio donde dormiría tu amiga, y te percataste que ya tenías un mensaje de él.