capítulo 15 pt 2

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Harry

Cansado de todos los programas, miré nuevamente la hora: ya son pasadas las tres de la mañana y no tengo ni un mensaje suyo que indique su regreso. ¿La estarían pasando bien? Mel se veía muy emocionada de ir, y sus padres me contaron lo mucho que ella disfrutaba de este tipo de eventos. Ella lucía hermosa (más de lo usual) con ese lindo vestido, y ambos prometimos que apenas saliéramos de esta situación tendríamos una cita en un fino restaurante que nos permitiera recrear la experiencia de un baile solo para nosotros. La verdad nunca me consideré fanática de esa clase de eventos, y en cambio ahora me muero de ganas por acompañarla a uno.

—Las vueltas de la vida.

Y vaya que 360 grados no alcanzan para medir el abrupto e intimidante cambio. He perdido casi toda mi cordura y la poca que se mantiene sigue en su lugar por el consuelo de que ella está presente a cada paso confiándome su mundo entero sin dudar por nuestro amor. No hay retorno a estas alturas, mas ahora que aceptó la carga de entrenar a ese simpático omega junto con otras tareas que según me explicaron, incluso si ya no tomará el puesto como beta, debe cumplir como hija del actual. Me enorgullece la decisión con la que avanza y enfrenta aquel pasado que tanto intentó enterrar y que en parte sé que sigue escondiendo, y si nos tomamos muchas horas en las cuales la he invadido de preguntas tanto serias como ridículas. La amo, y noto esas sonrisas falsas que ocultan tanto el dolor físico como emocional que carga. Por ello no la fuerzo. Busco darle su espacio y cuando esté lista le daré todo mi apoyo. Pero aún con todas las locuras, el ataque y lo paranormal, me siento feliz. Mi magnifica novia siendo su mejor versión me inspira. Esa es la esencia que me enamoró. Casi me mata del susto, lo admito, sin embargo desde entonces las cosas no son "taaaan" malas. Incluso sin tocarnos por el vínculo disfrutamos de la compañía del otro y de sus padres, que ya me aceptan casi al cien por ciento como pareja de su hija tras una gran cantidad de pruebas e interrogatorios de los cuales la pelinegra no tiene que enterarse. Su padre me intimidaba ya como suegro, ni hablar ahora que descubrí su peligrosa naturaleza. Lo más loco es que igualmente deseo permanecer aquí. Incluso sabiendo que ella no planea convertirme y que eventualmente envejeceré y moriré dejándola sola. Y eso me duele.

Ya me explicó el motivo y personalmente creo que es ridículo su miedo a que encuentre a mi mate y la deje. A ver: Matt y Mel se rechazaron, yo también en dicho caso apostaría todo con total de seguir a su lado. Me da igual las advertencias del pelinegro o las creencias que comparten, yo soy un humano. Creo y soy fiel a que el amor a primera vista no existe, y que este nace gracias a la dedicación y el esfuerzo de ambas partes. Y descartando ese argumento, el otro igualmente me resulta absurdo: "deberás abandonar el mundo humano para siempre". ¿Castigo o premio? Es la menor de mis preocupaciones esa; de todas formas en él me encuentro solo. Soy hijo único de un matrimonio completamente contrario al de mis suegros; en otras palabras, hijo de un hogar extremadamente disfuncional y, para colmo, ellos mismos fueron quienes me expulsaron de sus vidas y cortaron todo contacto cuando preferí ser un guardabosque en lugar de estudiar un "verdadero oficio".

No es muy difícil poner ambas vidas en una balanza y ver que con lo poco que aprendí en mi estadía que la gente aquí es superior en todo sentido a las civilizaciones humanas. En la manada todos se ayudan, están conectados y son leales entre sí. Son una manada cuya fortaleza se basa en la unión, y que en cuanto mi reclusión finalice pienso recorrer de arriba abajo. Sobre todo aquel puesto de helados que Braham dice es el favorito de su cachorra.

—¿Cachorra?

Me reí, ya me acostumbré a esa clase de términos tan tiernos. Todo gracias al anteriormente mencionado que lo repite a cada rato. ¿Será que no recuerda el nombre de su hija? Negando con la cabeza y ya cortando un poco con esta manía de sobrepensar todo, acomodé la sala y miré nuevamente el pequeño paquete en mis manos. Planeaba esperarar y sorprenderla, hablar un rato e irnos a dormir.

Rechazos  [DISPONIBLE EN FÍSICO]Where stories live. Discover now