Izuku El Rey De Tártaros

CAPITULO 3

Hace 5 años.

El año ya había pasado, Izuku Midoriya ya tenía 10 años. Fue sacado de su lugar y mientras esté dormía fue llevado al mismo lugar donde su madre estaba.

No era la misma celda, pero era cerca. Prácticamente a unos pasos de el, está sintió cuando Izuku llegó sintió felicidad ya que podría ver a su hijo, pero su felicidad no duró.

Izuku a penas tiene 10 años y deberá pasar su vida en la prisión. Sin derecho a elegir y mucho menos a vivir. Tendrá que pelear por su comida y por su vida.

Actualidad.

Hoy se cumple un año desde que Izuku salió de tartaros, no ha ocurrido mucho. Simplemente el se estuvo adaptando a su nuevo estilo de vida.

Nezu lo tuvo bajo su tutela, tuvo que enseñarle todo lo que una persona normal aprende en gran parte de su vida. Leer, escribir, sumar, restar, etc.

Para sorpresa del roedor Izuku absorbía conocimiento como si de un agujero negro se tratase. En 2 días aprendió a leer y a escribir. Claro que escribía lo básico, pero mientras las semanas pasaban su escritura iba mejorando, mejoro a tal punto que parecía broma que haya aprendido solo hace unas semanas.

Con las matemáticas fue diferente, si bien no le costaban el las detestaba simplemente no le veía sentido, de que te serviría saber la raíz cuadrada de "x" número, pero aún así aprendió.

No solo tuvo que ganar conocimiento académico, también tuvo que aprender sobre las leyes. Una de las que tuvo que aprender fue una que lo sorprendió, "No puedes usar tu quirk en lugares públicos".

El siempre dependió de su quirk, el hecho de no poder usarlo libremente se le hacía extraño. Era lo mismo que pedirle a alguien que no usará sus piernas.

Los quirks son parte de uno, no debería de existir tal ley este pensaba. Pero cuando lo pensó más abiertamente la ley tenía algo de sentido.

Los quirks son armas si uno lo desea, y si las personas tienen permitido el uso de estas la sociedad se caería en pedazos.

Dejando eso de lado, este año ocurrió algo muy peculiar. Izuku estuvo al borde de la muerte.

Si, escucharon bien, casi muere.

Luego de que Izuku limpiará la playa este volvió con Nezu, quién lo espero con +100 kilos de chocolate, los cuales eran parte del acuerdo.

Sin pensarlo Izuku se lanzó y clavó sus dientes en semejante cantidad de chocolate que había frente a el.

Nezu le advirtió que si comía mucho luego le iba doler el estómago, pero a Izuku poco le importó.

Y luego de una hora de puro comer chocolate cayó desmayado... Tuvieron que hacerle un lavado de estómago ;-;

Esto hizo que Izuku cada vez que viera un pedazo de chocolate vomitara, pero bueno al menos le quedan los demás dulces.

Dejando eso de lado hoy es el día en el cuál Izuku hacia la prueba para entrar a la academia. En realidad el ya tenía el lugar asegurado, pero Nezu quería observarlo en acción, claro que tiene restricciones.

Solo puede usar una particularidad en toda la prueba.

Además de esta las otras eran tan estúpidas como:
"No puedes atacar a alguien si te quita tus caramelos."

Una regla estúpida pero necesaria.

Bueno, ahora centremonos en Izuku quien está realizando el examen por escrito de UA.

"Esto va aquí, esto es así y esto se resuelve así..." Murmuraba Izuku mientras lo hacía.

Era difícil y a la vez fácil.

Para el el examen simplemente pasó. Poco tiempo le tomo hacerlo.

Estar en prisión significa no hacer mucho, significa no tener entretenimiento, por lo cual el tiempo para lar personas presas pasa de forma rápida.

Sin que Izuku se diera cuenta el ya estaba frente a la puerta del examen.

Cómo antes dije, al estar en un lugar tan monótono las personas encarceladas por lo general no se dan ni cuenta del tiempo que pasa a su alrededor.

Izuku, quien nació y creció en prisión todavía no se acostumbra al tiempo de afuera, algo estúpido pero cierto.

Con un fuerte gritó de parte del héroe Present Mic el examen dió inicio.

Izuku simplemente fue en su mundo, observaba los alrededores impresionado por la magnitud de la falsa ciudad de donde estaba.

Izuku salió del trance, metió su mano en el bolsillo y le dio un mordisco a una gran barra de chocolate.

Izuku: Bien, Nezu me dijo que por cada robot que destruyera me daría un chocolate.

Una vez dicho eso usando la particularidad de su madre Izuku arrasó con cada robot que se atravesaba por su camino.

En la sala de observación.

Los profesores estaban asombrados por la absurda cantidad de puntos que Izuku llevaba.

Para ellos era imposible ello, de no ser por las cámaras y porque ellos mismos las estaban mirando no creerían dicho hecho.

Ante la risa del roedor ninguno de ellos dijo nada, pues todos sabían que ese alumno... Mejor dicho, futuro alumno lo había traído el.

Nezu: Vamos a liberar al 0 puntos - dijo e inmediatamente pulso el botón que lo liberaba.

Hace 5 años.

"¿Que es lo que soy?".

"¿Que es esta voz?".

"¿Donde estoy?".

"Hace... Frío".

"Yo... ¿Que es lo que soy?"

Esos fueron los primeros pensamientos de Izuku Midoriya, quien recientemente volvía a tomar conciencia.

Sus ojos se fueron abriendo poco a poco, eran demasiado pesados.

Le costaba respirar, el aire no era tan puro como aquel que le suministraban.

Su cuerpo era pesado, jamás lo había movido... Al menos eso pensaba.

Si primera acción al observar su entorno fue llorar, la oscuridad que proporcionaba el lugar le llenaba el corazón de terror.

Se puso en una esquina, en posición fetal y lloro ante el oído de todos.

Risas aterradoras venían tras los grandes barrotes de la jaula en la cual Izuku estaba.

Sin embargo además de risas habían otras reacciones.

La reacción que nadie podía evitar, la preocupación de una madre por el llanto de su bebé.

Inko solo podía escuchar el llanto de su bebé, de su hijo.

Y por otro lado... Una reacción asquerosa...

Un sentimiento nefasto.

El futuro placer de poder robar la inocencia de dicho bebé.

Fin del capítulo.

No me maten, la verdad me olvidé de este fanfic, hoy de la nada hablé sobre el con unos conocidos y me entraron las ganas de retomarlo.