•②•

290 41 12
                                    

Las murmullos no se hicieron esperar ni mucho menos las miradas, todo el pueblo tiene la mirada clavada en los 2 visitantes tan repentinos, algunas miradas eran curiosas, sorprendidas, confusas y otras de total desconfianza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Las murmullos no se hicieron esperar ni mucho menos las miradas, todo el pueblo tiene la mirada clavada en los 2 visitantes tan repentinos, algunas miradas eran curiosas, sorprendidas, confusas y otras de total desconfianza. Los 2 Hombres ignoraron completamente los murmullos y miradas lo único que les importaba era encontrar un lugar donde beber, inmediatamente un hombre alto de cabello grisáceo con rayos blancos y cafés salió de lo que pareciera ser la oficina del Sheriff y se confirmaba que tal hombre era el Sheriff del pueblo gracias a una estrella de oro posicionada en su pecho del lado izquierdo.

— ¿Qué pasa por que el alboroto? —Pregunto el Sheriff para después darse cuenta de los 2 hombres a caballo que estaban parados justo frente a el—  oh... con que es por ustedes todo el alboroto, permítanme presentarme soy Tulio Triviño el queridísimo Sheriff de este Hermoso pueblo y con quienes tengo el honor de hablar??

oh yo soy emm... ¡Boriso Filipino! y el es mi compañero emm... ¡Said Montiños! Blah~, ¡si! y somos vended- —El hombre no alcanzo a completar su palabra ya que fue interrumpido, específicamente por una linda mujer de pelo verde con traje similar al del Sheriff, eso daba a entender que ella era parte de los oficiales del pueblo.

—  ¿Boriso Filipino, Said Montiños? esos nombres no me suenan, ¿Son extranjeros? —Pregunto la mujer

Oh.. emm ¡Si!, Somos vendedores extranjeros y venimos de muy lejos, solo pasábamos por este pueblo para buscar un lugar donde beber y pasar algunas noches blah~

— ¡Claro que hay un lugar donde beber!, solo tienen que seguir derecho y girar a la izquierda justo verán una cantina y sobre donde pueden pasar la noche hay un Hotel a unos pocos kilómetros de la cantina no se les hará difícil encontrarlo —Hablo el Sheriff

— oh muchas gracias por la instrucciones Sheriff, nos vemos —Ambos hombres comenzaron a avanzar en sus caballos siguiendo las instrucciones que el Sheriff les había proporcionado

— Oye tío, ¿No crees que esos hombres actúan extraño? —Pregunto la sobrina del Sheriff

—  ¿Qué?, Pamplinas son solo vendedores extranjeros sobrina, ¿Qué mal le podrían hacer al pueblo? —Dijo el Hombre totalmente seguro

—  ¿Qué?, Pamplinas son solo vendedores extranjeros sobrina, ¿Qué mal le podrían hacer al pueblo? —Dijo el Hombre totalmente seguro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"𝙏𝙃𝙀 𝙊𝙇𝘿 𝙒𝙀𝙎𝙏" ▎𝟯𝟭 𝙈𝙄𝙉𝙐𝙏𝙊𝙎 (𝙀𝙣 𝙚𝙙𝙞𝙘𝙞𝙤́𝙣)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora