No fue fácil cruzar el agitado océano invernal.
Por eso los navegantes que navegaban por el océano del Norte eran todos expertos. La Alianza del Norte solo había reclutado lo mejor de lo mejor de estos expertos.
Sin embargo, nada de eso importaba.
Baaaaaang!
El verdadero océano de la muerte se reveló a los navegantes que apenas habían logrado atravesar los remolinos para salir de la niebla roja.
"¡Mantén tu formación! ¡Lanza los cañones!
Los soldados de la Alianza Indomable finalmente volvieron a sus sentidos y comenzaron a moverse.
Había miedo en sus caras.
Toque, toque.
Los cadáveres de sus camaradas se interpusieron en su camino mientras intentaban moverse
rápidamente, sin embargo, no tuvieron tiempo de notar este problema.
"Uggggggggh-"
Había un soldado en el suelo envenenado, pero aún no muerto. Su cuerpo fue pisado por otro
soldado, sin embargo, el soldado solo miró hacia este soldado envenenado antes de continuar.
Pensaba que él también moriría si se tomara el tiempo de detenerse para ayudar.
El soldado simplemente siguió moviéndose mientras pisaba cadáveres.
Algunos de ellos habían estado prestando atención al lugar donde caminaban hasta hace un
momento. Sin embargo, ya no podían hacer eso.
"¡Muévete rápido si no quieres ser enterrado en el mar!"
Uno de los caballeros gritó hacia los soldados.
"¡Comienza a remar si quieres poder llevar los cadáveres de tus amigos a casa!"
Necesitaban sobrevivir para cuidar los cuerpos de sus amigos.
De lo contrario, todos morirían aquí y nadie podría encontrar ninguno de sus cuerpos.
No había sido así cuando salieron por primera vez con una flota de trescientos barcos. Pensaron que podrían destruir cualquier cosa y todo en ese punto.
Sin embargo, el resultado fue todo lo contrario. Fue su enemigo quien parecía listo para destruir
cualquier cosa y todo.
"¡Rellene la pólvora!"
"¡¿Dónde están los arqueros ?!"
La cubierta era caótica.
Los caballeros se formaron mientras los magos comenzaron a disparar hechizos.
Bang. ¡Bang!
Muchas de las flechas rebotaban en los escudos mágicos de los magos y los escudos de los
caballeros. Un mago del Reino de Paerun no pudo evitar jurar después de ver la lluvia de flechas.
"¡Maldición! ¿Cuándo prepararon tal cosa?
Podían ver una flota de naves rojas casi comparable a la suya en número.
"¡Cómo pudo el Reino Roan...!"
La proclamación del Reino de Roan en respuesta a la suya estaba llena de confianza, sin embargo, la mayoría de los reinos del continente occidental no pusieron mucha atención en el Reino de Roan.
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Solo renaci en una novela de fantasia 2
الخيال (فانتازيا)La historia no es mia solo me tomo el lujo de traduciría y de que pasan un buen momento de lectura como yo, espero contar con su apoyó como Simpre.
